El secretario general de CCOO CLM, José Luis Gil, ha denunciado los «disparates» económicos del Ejecutivo regional porque ha crecido la deuda «más que la media del país» cuando se han producido más recortes y «se ha machacado más a la gente» que en ninguna otra comunidad autónoma.
Gil, en rueda de prensa y a preguntas de los periodistas tras presentar las peticiones de su sindicato a las fuerzas políticas que concurrirán a las elecciones autonómicas sobre servicios públicos, ha lamentado que la deuda de casi 13.000 millones de euros que arrastra la región «hipoteca el presente y el futuro» de la región.
Un hecho, ha juzgado, que «viene a desmentir el discurso oficial del Gobierno regional y es un elemento de preocupación para todos, especialmente para las generaciones futuras».
«Después de los disparates que ha hecho el Gobierno, de sufrimiento que ha infringido a miles de familias, de la falta de sensibilidad con los colectivos más vulnerables y más azotados por la crisis, el resultado es que nos hemos endeudado muchísimo más que la media del país», ha subrayado.
Por ello, Gil ha contrapuesto que «se recorta, se machaca a la gente mas que en ningún sitio y, sin embargo, crecemos en deuda mas que en ningún otro lugar».
Para Gil esto «pone de manifiesto el fracaso de la política económica que se ha seguido el Gobierno y que hay que dar un giro radical para atender a las personas y recuperar la economía regional», que pasa, ha enunciado, por «la inversión pública» para reforzar «el débil tejido productivo» que sostiene a la región.
«Es muy duro que tras tanto sufrimiento, el paraíso terrenal que prometía hace cuatro años el Gobierno actual no se meta cada día más, y me refiero a los creyentes, en el infierno insoportable que se esta produciendo en Castilla-La Mancha», ha apuntado.
Gil ha concluido que «por eso es perentorio, urgente, que la gente tenga un poco de memoria y que desde esa memoria deposite el voto el próximo 24 de mayo».
CCOO CONFÍA EN UNA RÁPIDA RESPUESTA Y FAVORABLE AL RECURSO DEL HOSPITAL DE TOLEDO
José Luis Gil ha confiado en que haya «pronto» una respuesta, que además espera sea favorable «porque modestamente creemos que tenemos razón», al recurso contencioso-administrativo contra el pliego de condiciones del futuro hospital de Toledo.
Gil ha entendido que «es una barbaridad» y que «vulnera la ley», además de ser «injusto» con los trabajadores y el servicio que «se tiene que prestar desde ese hospital», la paralización de una obra que, ha entendido, «emblemática y necesaria».
En rueda de prensa para plantear las reivindicaciones de CCOO en materia de servicios públicos ante las próximas elecciones, a preguntas de los periodistas, Gil se ha hecho numerosas preguntas ante «el anuncio» por parte del Ejecutivo regional del reinicio de las obras «pocos días antes de las elecciones».
Gil ha exigido «responsabilidades políticas y legales» al Gobierno regional y, en particular, a su presidenta, María Dolores de Cospedal, «por tardar cuatro años en reactivar la obras».
«¿Porqué no lo ha hecho al día siguiente de tomar posesión? Ahora si es necesario y no lo era hace cuatro años. ¿Tan complicado era desde el punto de vista administrativo esa gestión, chapucera por cierto, que hemos recorrido ante los tribunales», se ha preguntado.
El secretario general de CCOO CLM ha ido aún más lejos sobre la tardanza al hacerse otras preguntas: «¿tenían que ajustar el negocio con la gente más cercana?, ¿había dificultad con la UTE que estaba construyendo la infraestructura? o ¿había otro problema de carácter más oscuro?».
A su juicio, todo esto «requiere una explicación a los ciudadanos y también al Parlamento regional y exigir responsabilidades, porque no puede ser que este paralizada cuatro años, cómo se ha sacado a licitación, se privatice parte de la gestión y, además, se haga un mal uso de los fondos públicos, que es lo que el Gobierno pretende hacer con la adjudicación», ha enjuiciado.
Según Gil es «una barbaridad» que el Ejecutivo regional quiera «hipotecarnos para 30-40 años» y, por ello, ha confiado en que «los jueces nos den la razón a nosotros y a los otros que también han recurrido esta forma de actuar».
Ha dicho desconocer el coste que ha supuesto la paralización «inapropiada e injustificada» de las obras, porque «el coste social es difícilmente calculable», y ha reiterado, por enésima vez, que «hoy el hospital no es una realidad porque Cospedal decidió pararlo cuando llegó al gobierno, hace ya cuatro años, nadie más».
«Es de principio a fin una barbaridad muy mal gestionada que alguien tendrá que poner remedio y espero que sea en las urnas, el próximo 24 de mayo», ha concluido.