Arturo Romaní, a la derecha, durante su comparecencia ante los periodistas después del Consejo de Gobierno.
El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha comparecido en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno para anunciar que la región ha cumplido con el objetivo de déficit fijado para el año 2013 y que era del 1,3 por 100.
Según el consejero, la región ha cerrado por debajo de ese límite, al tiempo que ha confirmado que mañana, 31 de enero, enviarán los datos al Ministerio de Hacienda de Cristóbal Montoro.
Romaní ha recalcado que el objetivo se ha cumplido a pesar «de dos gastos excepcionales que ha tenido la comunidad autónoma» y que afectarán al objetivo de 2013, que han sido «el impuesto nuclear que fue anulado por el Tribunal Constitucional, en concreto dos leyes de los años 2000 y 2005, y que ahora tenemos que devolver los impuestos ingresados durante 10 años; y un error que detectamos en las declaraciones de IVA de la empresa pública Gicaman, del Gobierno anterior, y que hemos regularizado, porque nosotros cumplimos con las obligaciones fiscales».
Circunstancias extras que, ha afirmado Romaní, «no supondrán ajustes excepcionales para compensar estos gastos y que los ciudadanos no tendrán que pagar en recortes».
El consejero ha finalizado recalcando que esos gastos excepcionales «son un desastre, a pesar de los que opinan que lo de la herencia recibida es una excusa. Pero eso no debe llevar un ajuste paralelo de gasto, los ciudadanos no tendrán que pagar doblemente».