La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha asegurado hoy que el Gobierno de Castilla-La Mancha no va a cambiar su política de atracción de empresas por el conflicto de Cataluña, porque «no vamos a hacer una batalla por algo que nos afecta a todos».
[ze_summary text=»La que está llevando hasta ahora está dando frutos y no hay nada que hacer en ese ámbito»]La que está llevando hasta ahora está dando frutos y no hay nada que hacer en ese ámbito[/ze_summary]A preguntas de los periodistas, Franco ha dicho que Castilla-La Mancha no va a cambiar la política de atracción de empresas, ya que la que está llevando hasta ahora está dando frutos «y no hay nada que hacer en ese ámbito«, a pesar de que el conflicto catalán está afectando a la toma de decisión de empresas radicadas en Cataluña.
Franco ha apuntado que están tomando decisiones en un primer momento sobre el traslado de su sede social, pero que en principio no supone que vaya a haber un desplazamiento físico ni de las infraestructuras de las empresas, ni de los trabajadores.
Esos cambios de domicilio social están llevándose a cabo fundamentalmente hacia Madrid y algunas como alternativa hacia Valencia y Alicante, ha apuntado la consejera, que ha reiterado que Castilla-La Mancha no va a cambiar la política de atracción de empresas, porque «lo que nos interesa es atraer todo el proceso productivo, no solo de la sede social o del domicilio fiscal».
«Lo que interesan son nuevos proyectos»
«A nosotros lo que nos interesa es la implantación de nuevos proyectos, esto no va a hacer que cambiemos nuestra política ni de captación de nuevos proyectos ni de estímulos a la implantación de empresas ni a la contratación y formación de personas».
Por otra parte, ha explicado que no está cuantificado el flujo comercial entre Castilla-La Mancha y Cataluña y preguntada sobre cómo podría afectarlo el conflicto, ha considerado que las relaciones comerciales se van a seguir manteniendo.
En este sentido, y aunque ha aclarado que no es comparable en ningún caso, ha apuntado que las relaciones comerciales de las empresas de Castilla-La Mancha con el Reino Unido se están incrementando, a pesar del «brexit«.