Primero se tiene que aprobar el Plan Económico Financiero (PEF) en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que se calcula que será a finales de febrero o principios de marzo. De esta forma, se permitirá a la Junta acceder a nueva financiación a través de la colocación de deuda a largo plazo. Además, se sumarán a la futura línea de créditos ICO que necesita una modificación legislativa que supone unos dos meses más de espera para administraciones y empresas.
A principios de verano. Ésa es la última fecha, y en principio parece que definitiva, que se ha fijado el Gobierno regional para presentar el calendario de pagos a proveedores. Así lo aseguraron tras la celebración de la primera reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera de la era Rajoy tanto el consejero de Presidencia y Administraciones Públicas, Leandro Esteban, como el consejero de Economía y Hacienda, Diego Valle, y la propia presidenta María Dolores de Cospedal, que lo confirmó en Fitur.
Cospedal aseguró que a finales de primavera, antes de verano, se pondrá empezar a pagar dentro de un calendario de pagos a proveedores de la Junta.
Para que esté listo el calendario de pagos tiene que aprobarse antes el Plan Económico Financiero (PEF) que, como explicó Diego Valle en una entrevista a EFE, tiene que darle el visto bueno el Consejo de Política Fiscal y Financiera. Valle calcula que será en cinco semanas, esto es, a finales de febrero o principios de marzo.
Una vez aprobado, la Junta podrá acceder a nueva financiación a través de la colocación de deuda a largo plazo. Valle confía en que a finales de enero o comienzos de febrero el PEF tenga el visto bueno «oficioso» de los técnicos del Ministerio de Hacienda y así pueda ir preparando el terreno con las entidades financieras para colocar la deuda.
La otra vía de financiación llegará a través de la futura línea de créditos ICO que el Gobierno de Rajoy pondrá a disposición de las comunidades autónomas y que aún no está definida.
La presidenta regional ha explicado que la línea de crédito requiere una modificación legislativa que conllevará una dilación de unos dos meses, por lo que ha lamentado que no se hubiera adoptado esa medida hace ya seis meses, como pidieron «muchas comunidades autónomas».
La Junta tiene en estos momentos más de 3.000 millones de euros pendientes de pago a acreedores, un endeudamiento de 7.000 millones, un endeudamiento en cuatro años de 8.300 millones, «una deuda de casi 1.000 millones de pesetas al día los 365 días del año de los cuatro años», explicó Valle.