Aunque aún no está cerrado si será o no la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, quien presente personalmente los presupuestos de la Junta para el próximo año, como hizo con los de 2012, sí se sabe que su Gobierno les dará luz verde el jueves 27. Serán de nuevo unas cuentas muy restrictivas, quizás más que en 2012, lastradas por un endeudamiento que exige de las arcas regionales el pago de cuatro millones de euros al día.
Además del peso que la deuda tiene en la maltrecha economía de la administración regional, 2013 conlleva nuevas dificultades, como la obligación de cumplir con un déficit del 0,7 y la bajada de los ingresos del Estado, de los que el presupuesto castellano-manchego tiene una dependencia de más del 80 por 100. La caída de la economía por encima de las previsiones merma ese capítulo, fundamental para CLM.
Pueden ser las peores cuentas de la historia
El consejero de Presidencia, Leandro Esteban, en su habitual comparecencia semanal tras la reunión del Consejo de Gobierno, ha confirmado que los Presupuestos estarán en las Cortes antes del 1 de octubre, como marca la ley y, aunque no ha adelantado niguna cifra concreta, sí que ha reiterado que «serán ajustados a lo que se puede gastar y serán unas cuentas que digan la verdad a los ciudadanos, alejados de las viejas prácticas».
El consejero dijo también sobre las cuentas públicas regionales para 2013 que «por culpa de herencia recibida, pagamos cada día cuatro millones de euros en intereses y amortización de la deuda. Ése es una hándicap del que partimos, pero vamos a cumplir con el objetivo de déficit».