El sindicato CSIF, que no ha secundado la huelga general convocada, ha destacado el comportamiento «ejemplar» de los empleados públicos durante la jornada, así como el clima de «normalidad absoluta» en los centros de trabajo.
En un comunicado, CSIF ha lamentado también la «capitalización» de la huelga que están realizando algunos partidos políticos que, «aunque ahora estén en la oposición, antes estaban gobernando y aplicaron severos recortes sobre el empleado público y la población general», ha criticado.
También ha recalcado que este sindicato entiende que la huelga no es el instrumento más apropiado para defender los intereses de los empleados públicos y que apela «a seguir trabajando el día después de la huelga general».
Por último, CSIF ha anunciado que mantendrá la actividad sindical en las calles y en las mesas de negociación para alcanzar «un pacto de Estado que permita modernizar y eliminar duplicidades en las administraciones públicas».