El sindicato CSIF pedirá que no haya extinciones de contrato en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha planteado la Fundación Caja Castilla-La Mancha, entidad de unos 80 trabajadores que se nutre de los beneficios del Banco CCM, integrado en Liberbank e inmerso en otro ERE.
El representante de CSIF en el grupo Liberbank, José Manzanero, ha explicado a Efe que su sindicato pedirá en la mesa de negociación -que se reunirá por primera vez, previsiblemente, el próximo 16 de enero- que «no haya despidos» y que se tomen otro tipo de medidas para evitar esta situación.
Manzanero ha reconocido que la Fundación Caja Castilla-La Mancha se encuentra en una situación «muy grave» porque «ahora mismo no tiene ninguna vía para recibir ingresos» y «lleva tres años sin recibir nada».
Por su parte, el asesor jurídico de la fundación, Rogelio Sánchez, ha indicado a Efe que no informarán de las medidas propuestas en el ERE hasta que no se reúna la comisión negociadora, si bien ha apuntado que será una asesoría jurídica externa a la entidad la que dirija las negociaciones.
Sánchez tampoco ha querido aclarar los motivos por los que la entidad presenta el ERE y ha indicado que se informará de ello, en primer lugar, a los trabajadores.
La Fundación Caja Castilla-La Mancha envío el pasado 26 de diciembre a sus trabajadores una carta firmada por el presidente, Tomás García-Cuenca, en la que les anunciaba su intención de presentar un ERE y les pedía que eligiesen a sus representantes en la negociación.
La Fundación CCM se convirtió en 2010 en titular del 25 por 100 del Banco CCM y encargada de gestionar la obra social de la entidad tras la transformación de la antigua caja de ahorros.