lunes, 25 de noviembre de 2024
EMPRESAS “MADE IN” CLM: Vicente Carrillo 01/09/2012junio 13th, 2017

Con Blas Carrillo Alarcón y sucesores comenzamos una sección dentro de Economía dedicada a las empresas de Castilla-La Mancha.
En 1834 «el abuelo Moreno», como se le conocía a Blas Carrillo, fundó un pequeño taller en Casasimarro (Cuenca) donde se inicio una saga guitarrera que continúa hasta nuestros días y que ha cautivado a artistas como Paco de Lucía, Cañizares, Tomatito, Alejandro Sanz o Keith Richards.

Blas Carrillo Alarcón heredó de su familia materna el oficio de construir instrumentos musicales de cuerda, principalmente guitarras, recoge el libro «Grandes empresarios de Castilla-La Mancha», trabajo realizado por un grupo de investigadores de la Universidad de Castilla-La Mancha y realizado a iniciativa de la Confederación de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam).


En 1834 Blas monta su taller, aprende de sus primos (que contaban con una tradición mayor en el arte de la fabricación de las guitarras). De este modo, se aleja del campo donde trabajaba como mozo de mulas, y se centra en el mundo de los instrumentos musicales. Pronto destacará de sus maestros al realizar trabajos de mayor calidad.

Al taller se incorporará años después su hijo Vicente Carrillo López, que continuará con la empresa familiar. Su aportación, la publicidad que logró dar a sus creaciones. Ésta llegó en Sevilla, donde participó en la Exposición Iberoamericana en el año 1929. Allí la reina Victoria Eugenia se interesó por su trabajo y Vicente le regaló uno de sus instrumentos. A partir de ese momento, todo el mundo quiere tener una de sus creaciones.

Al hijo de Blas le sucedió su nieto, Vicente Carrillo Cantos. Con la tercera generación llegó el objetivo de darse a conocer en el extranjero. De hecho, sus catálogos ya se empiezan a hacer en español, inglés y francés.

Vicente falleció en 1971, por lo que su mujer Gabriela Casas Fornier se hizo cargo de la empresa logrando aumentar el prestigio de la misma.

A Gabriela le llegó un encargo de Estados Unidos, la elaboración del dulcimer, un instrumento de origen medieval. Y así, poco a poco, fue aumentando su fama, la fama de los Carrillo.

Ahora, su hijo, Vicente Carrillo Casas está al frente de la empresa familiar que sigue destacando por la calidad de sus productos, la experiencia acumulada y el perfeccionamiento técnico.

Salvo una ayuda para la construcción de sus nuevas instalaciones y otras del Instituto Español de Comercio exterior (ICEX) para poder asistir a ferias en el extranjero, durante generaciones esta empresa no disfruto de ayuda económica pública.

Los premios se han multiplicado durante estos años y los artistas que quieren un instrumento de Carillo también.

Ahora se espera que se pueda sumar la siguiente generación a la empresa, la de Lydia Carrillo, hija de Vicente Carrillo Casas.

MÁS INFORMACIÓN EN EL LIBRO «GRANDES EMPRESARIOS DE CASTILLA-LA MANCHA»

(Visited 192 times, 1 visits today)