El portavoz adjunto del PP en las Cortes de Castilla-La Mancha, Lorenzo Robisco, ha recalcado hoy que «el rescate» de Caja Castilla-La Mancha (CCM) costó 9.000 millones de euros de dinero público.
Robisco se ha referido en rueda de prensa al juicio que ha comenzado hoy en la Audiencia Nacional contra el expresidente de Caja Castilla La Mancha Juan Pedro Hernández Moltó y su ex director general Ildefonso Ortega por la presunta maniobra contable con la que ocultaron las millonarias pérdidas de la entidad del ejercicio 2008.
Frente a la opinión del PSOE, cuya portavoz en las Cortes, Blanca Fernández, dijo ayer que en CCM «nadie se llevó ni un solo euro del dinero público ni del dinero de los castellanomanchegos», el portavoz del PP ha destacado que en marzo de 2009 el Consejo de Ministros aprobó una inyección de fondos públicos de 9.000 millones de euros.
Además, ha dicho que es «muy probable» que la Junta tenga que hacer frente a otros 30 millones de euros «de dinero público» para compensar a los propietarios de los terrenos expropiados del aeropuerto de Ciudad Real.
«No se puede venir aquí diciendo que este caso no ha supuesto un despilfarro de dinero público. Si a los 9.000 millones y a los 30 millones que tiene que pagar la Junta por las expropiaciones, le añadimos las inversiones que se hicieron en infraestructuras hidráulicas, carreteras y otras ayudas públicas a empresas que participaron en el proyecto, vemos que el coste para los españoles y los castellanomanchegos ha sido muy elevado», ha afirmado.
En este sentido, ha recordado que el actual presidente de la Junta, Emiliano García-Page, fue consejero de Fomento y vicepresidente de la Administración regional en esa época y ha añadido que «hoy, el que va a juicio es un socialista declarado: Hernández Moltó«.
Preguntado por las declaraciones de Hernández Moltó, que antes de iniciarse el juicio ha dicho que tiene «la conciencia tranquila», Robisco ha respondido que él no entra en la conciencia de cada uno, pero «sí en la mala gestión de dinero público».
«En el caso de los que se sientan en el banquillo suelen tener la conciencia limpia», ha opinado el portavoz del PP, quien ha considerado que estas palabras pueden decirse para la «tranquilidad» de cada uno.