El precio de la vivienda libre en Castilla-La Mancha subió un 5,3% interanual en el segundo trimestre del año, según el Índice de Precios de Vivienda (IPV) del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicado este jueves.
El incremento registrado en Castilla-La Mancha se sitúa por debajo de la media nacional, que anota una subida del 7,8%, tasa 1,5 puntos superior a la del trimestre previo y la más elevada desde el segundo trimestre de 2022, cuando se incrementó en un 8%.
En el caso del coste de la vivienda nueva, se encareció un 4,2%, mientras que la de segunda mano escaló un 5,5% en la región.
A nivel nacional, con el repunte del segundo trimestre de 2024, se acumulan ya 41 trimestres consecutivos de alzas interanuales en el precio de la vivienda libre.
Este impulso del 7,8% en los precios se debió tanto a la vivienda nueva como a la de segunda mano. En concreto, el precio de la vivienda nueva se disparó un 11,2% interanual en el segundo trimestre, tasa 1,1 puntos superior a la del trimestre anterior y la más alta desde el tercer trimestre de 2007, cuando estalló la crisis de las hipotecas subprime.
Por su parte, el precio de la vivienda usada aumentó un 7,3% interanual en el segundo trimestre, 1,6 puntos por encima de lo que lo hizo en el trimestre previo y su mayor repunte desde el verano de 2022.
Navarra y Aragón lideran los ascensos
Todas las comunidades autónomas elevaron el precio de la vivienda en el segundo trimestre en tasa interanual.
Los mayores incrementos se registraron en Navarra (+10,3%), Aragón (+9,9%), Andalucía y Ceuta (+9,5%) y Cantabria, Comunidad Valenciana y La Rioja, todas ellas con un avance del 8,6%.
Los incrementos más moderados se dieron en Castilla-La Mancha (+5,3%), Extremadura y Baleares (+6,2% en ambos casos) y Galicia y Cataluña, ambas con un repunte interanual en el precio de la vivienda libre del 6,7%.
La mayor subida de precio en 9 años
En tasa intertrimestral (segundo trimestre sobre primer trimestre), el precio de la vivienda libre subió un 3,6%, su mayor alza trimestral desde el segundo trimestre de 2015.
Entre abril y junio, el precio de la vivienda usada creció un 3,7%, su mayor incremento trimestral también desde el segundo trimestre de 2015.
Por su parte, la vivienda nueva elevó su precio un 2,7%, moderando en casi tres puntos el avance experimentado en el primer trimestre del año.