El 17 de diciembre se ha fijado como tope la dirección de Elcogas para presentar al Ministerio de Industria el informe de viabilidad de la planta de Puertollano (Ciudad Real), que deberá ser aprobado por el Ministerio antes del 31 de enero de 2016.
Así lo ha avanzado hoy, en rueda de prensa, el director de la central de Puertollano, Alfredo García Aránguez, que ha explicado que entregando el estudio en esa fecha hay «tiempo suficiente» para que el Ministerio tome las decisiones oportunas antes de que concluyan los tres meses de prórroga concedidos para la desconexión de la central.
García Aránguez ha dicho que no cree que las elecciones del 20 de diciembre puedan condicionar el proceso y ha señalado que «las empresas gestionan sobre realidades y no sobre acontecimientos políticos o sociales».
En este sentido, ha dicho que «la empresa no está haciendo un informe de viabilidad porque haya unas elecciones sino porque el Ministerio ha puesto sobre la mesa una posibilidad de apoyo regulatorio tal y como venimos solicitando desde hace bastante tiempo».
El director de la planta ha añadido que la aprobación del informe de viabilidad requerirá un apoyo por parte del Ministerio para cubrir los costes de explotación, que superan los ingresos por venta de electricidad.
De esta forma, la inclusión de Elcogas en un régimen retributivo especial deberá cubrir las pérdidas de los aproximadamente 36,5 millones de euros de media al año.
García Aránguez también ha destacado el esfuerzo financiero realizado por los socios accionistas de Elcogas, que a lo largo de su historia ha tenido unas pérdidas de 207 millones de euros, «muy al contrario del tratamiento que han recibido centrales de similares características construidas en Corea, Japón, China o Estados Unidos, donde sus propietarios obtuvieron ayudas y apoyos regulatorios tanto a la construcción como a la explotación de las plantas».
Ha lamentado que a pesar de que la central de Elcogas es un referente en investigación, desarrollo e investigación para la gasificación de carbón, y a pesar del tiempo transcurrido, «sigue siendo una tecnología inmadura».
En su opinión, a Elcogas le ha faltado una estabilidad regulatoria, a la que ahora aspira con el acceso al régimen retributivo específico y que le podría permitir «superar definitivamente la situación de cierre dando lugar a un nuevo escenario de futuro para la planta».
Ha justificado la inviabilidad económica de Elcogas indicando que el megavatio producido por la planta en 2015 ha sido un 37 por 100 más caro de lo que se paga en el mercado eléctrico.
El informe que está preparando la empresa incluirá, entre otras cuestiones, las inversiones de nuevo equipamiento para producir electricidad con una hibridación de coque de petróleo, carbón y un 30 por 100 de orujo de aceituna (biomasa) y acceder al régimen retributivo específico.
El «orujillo» de aceituna es una materia abundante en la zona y con garantías de suministro, aunque Aránguez ha señalado que los contactos establecidos con empresas de ámbito nacional son, de momento, preliminares.
Respecto, a la recuperación de los contratos con las empresas auxiliares en caso de que se restablezca la producción, ha precisado que «aunque mantenemos el ofrecimiento de contratación a las personas de las empresas auxiliares necesarias cuando se haga el reinicio de la explotación de la planta, lo que no podemos es comprometernos sin conocer el alcance de las nuevas necesidades de la central».
Por otra parte, ha apuntado que aunque el estudio no incluye ningún capítulo dedicado a la reducción de costes salariales de la empresa, «un plan de futuro a medio plazo exigirá una reorganización de los costes y una tendencia a su disminución».
Ha dicho que Elcogas tiene un futuro más despejado que hace dos semanas, pero también ha advertido de que «no conviene perder la visión realista de que el informe que presente la empresa debe ser aprobado por el Ministerio y luego hay que ganar el concurso para incorporarnos al régimen retributivo especial y, además, tener una retribución suficiente para acometer las inversiones de las nuevas instalaciones técnicas».