Castilla-La Mancha registró en 2012 un total de 1.066 accidentes laborales de trabajadores autónomos, entre los cuales hubo dos mortales y dos muy graves, según un informe elaborado por la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA). De acuerdo con dicho informe, Castilla-La Mancha fue la quinta comunidad autónoma con mayor número de siniestros en el colectivo de trabajadores autónomos, con 1.033 accidentes leves, 29 graves, dos muy graves y dos mortales.
Andalucía, Comunidad Valenciana y Galicia fueron las regiones con más siniestralidad laboral en 2012 entre los trabajadores autónomos si bien se trató, en su mayoría, de accidentes leves mientras que la mortalidad laboral se saldó con 17 víctimas, de ellas 3 en Castilla y León y otras 3 en Galicia.
Según el informe de ATA, el año pasado se produjeron en el conjunto del país 13.171 accidentes de autónomos, de ellos 12.819 fueron leves, 313 graves, 22 muy graves y 17 mortales. De los siniestros con víctimas, además de los seis fallecidos en Castilla y León y Galicia (tres en cada caso), dos se registraron en Castilla-La Mancha, y uno en cada una de las siguientes autonomías: Andalucía, Aragón, Asturias, Comunidad Valenciana, Cataluña, La Rioja, Madrid, Murcia y País Vasco.
Según los datos globales, la mayor siniestralidad se concentró en Andalucía (2.722), por delante de la Comunidad Valenciana (1.358) y Galicia (1.301). Galicia también contabilizó el mayor número de siniestros laborales muy graves (4) y graves (74).
Por contra, cinco comunidades no registraron ningún accidente mortal en el colectivo de autónomos: Baleares, Canarias, Cantabria, Extremadura y Navarra, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. Tampoco se dieron accidentes de carácter muy grave en las siguientes regiones: Baleares, Comunidad Valenciana, Canarias, Cantabria, Extremadura, La Rioja, Murcia, Navarra, Ceuta y Melilla.