El secretario general de CCOO CLM, José Luis Gil, ha confirmado hoy que se va a recurrir la resolución de la Delegación del Gobierno de prohibir la concentración convocada a las puertas del Campus de Toledo con motivo del inicio del curso universitario 2014-2015 que presiden los Reyes de España.
Así se ha referido Gil a la decisión de prohibir la concentración convocada por CCOO, «en solitario», ante la inauguración del curso universitario que presiden los Reyes de España, para protestar por los recortes en empleo, inversiones, becas y ayudas a la investigación por los Gobiernos de España y de Castilla-La Mancha.
«Si no nos quieren que nos teman», ha dicho el secretario general de CCOO CLM en rueda de prensa, quien ha culpado de la decisión al delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, al «prohibir» el derecho de manifestación «para dejar patente nuestro rechazo mas absoluto a las políticas educativas» de los gobiernos nacional y castellanomanchego.
Una prohibición, según Gil, que «es una manera de amordazar la libre expresión y participación de los ciudadanos, de manera cívica, firme, pero democrática, de protestar ante los poderes públicos».
«Vamos a recurrir», ha atajado Gil, quien ha estimado que «los tribunales nos volverán a dar la razón ante decisiones arbitrarias del Delegado del Gobierno que no conoce el diálogo, solo la imposición, ante hechos que parece que le molestan».
Ha añadido que «es saludable que los Reyes de España pudieran observar que los enseñantes, y en particular CCOO, no comparten este acto ni las políticas de España y menos de Castilla-La Mancha».
Precisamente, en este contexto, Gil ha tachado de «muy poco acertada» la elección de Castilla-La Mancha para la inauguración del curso universitario porque, ha explicado, «es poco presentable que Cospedal quiera lavar sus vergüenzas trayendo a los Reyes de España para suavizar el desaguisado que ha hecho, y está haciendo».
«Y digo que Castilla-La Mancha no es el lugar más adecuado porque si algo nos distingue es que se trata de la región donde se han hecho los recortes más brutales en la educación y, por tanto, no hay nada que celebrar», ha subrayado.
Ha confirmado que estaba invitado al acto, junto al secretario general de la Federación de Enseñanza, Francisco García, también presente en la comparecencia, pero «nuestro sitio está en la calle, reivindicando que se respeten los derechos de los estudiantes actuales y los futuros».
«No es un buen ejercicio de Su Majestad que venga a poner el broche a una apertura de un curso que adolece de muchas cosas, entre ellas recursos suficientes para que las cosas vayan bien» y, por ello, ha concluido, «hoy es un día triste para la educación».