El secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, José Luis Gil, ha hecho balance de los cuatro años de la legislatura de María Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha. Gil ha destacado que la gestión de la presidenta «deja mucho que desear y muchas víctimas».
«Lo más importante, la parte más positiva de la legislatura, es que finalmente termina para miles y miles de personas maltratadas por la actuación del Gobierno». Así comenzaba el secretario general de CCOO en Castilla-La Mancha, José Luis Gil, el desayuno informativo con la prensa para valorar la gestión de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, durante estos últimos cuatro años en Castilla-La Mancha.
Gil recordaba que «hemos venido denunciando las consecuencias nefastas de los recortes del PP en CLM» y puntualizaba que «Rajoy y Cospedal han sido un tándem mortífero para mucha gente«.
Continuaba su intervención para sentenciar que «la última reforma laboral ha triturado los salarios, ha favorecido los despidos y la generación de empleo que se crea es precario, además de existir un ataque sistemático en la negociación colectiva». Además, «ha dado a los empresarios más poder del que nunca habían pedido». Por ello, desde CCOO consideran que es «imprescindible cambiar las reformas laborales para que los derechos de los trabajadores sean constantes, recuperar y regularizar la capacidad del convenio colectivo y poner de manifiesto que hace falta más sindicato en la empresa para que haya más derechos».
EL DÉFICIT PÚBLICO Y LA «MALDITA» AUSTERIDAD
Para CCOO el principal objetivo de Cospedal en Castilla-La Mancha ha sido reducir el déficit público y «lo ha conseguido», destacaba Gil, quien señalaba que «somos la única región del mundo que ha logrado reducir el déficit en un año en más de seis puntos». Eso sí, «esto tiene consecuencias que estamos sufriendo», la principal: «la ruina, la pobreza del conjunto de la región. Hoy hay gente que a raíz de esas políticas pasa hambre, literalmente. Esto es inadmisible»
Gil destacaba que «no hay ni un dato positivo que demuestre los beneficios de la maldita austeridad».
Es más, «Rajoy y Cospedal han despreciado a los ciudadanos y a la democracia. Ellos siguen a lo suyo, da igual lo que le pase a la gente, lo suyo es recortar salarios, debilitar la negociación colectiva… Persiguen a los huelguistas y a los sindicalistas. Es la cultura más genuina de la represión que hemos sufrido antaño», destacaba Gil, para quien la máxima del Gobierno del PP ha sido «salvar a los banqueros y obviar a las personas».
LAS CIFRAS DEL DESEMPLEO
Tampoco en materia de empleo ha destacado para José Luis Gil el Gobierno de Cospedal y lo resumía en tres cifras: 70.000, 50.000 y 15.000. «70.000 trabajadores menos en la Seguridad Social, 50.000 personas más sin coberturas y 15.000 parados más que hace cuatro años».
La presidenta «ha conseguido algo histórico en Castilla-La Mancha, donde tener empleo no significa dejar de ser pobre, la gente trabajando sigue siendo pobre, no llega a fin de mes». El tándem Rajoy-Cospedal “ha multiplicado la situación de pobreza y marginación social”.
SIN LOCOMOTORA PARA REACTIVAR LA ECONOMÍA
Cuatro años en los que «la única locomotora a la que se podía enganchar la iniciativa privada para que la economía creciera» era el Gobierno, los servicios públicos, que representan el 35 por 100 del PIB regional, pero «el Gobierno no la ha utilizado».
Desde CCOO piden que se eliminen los copagos en Sanidad, además “es fundamental poner elementos que faciliten la igualdad en Eduación”, por eso demandan becas y comedores escolares”.
LA «BURLA» QUE SE HA HECHO A LOS DEPENDIENTES
En Dependencia, consideran que “el Gobierno ha cerrado los ojos y ha dejado que la gente sufra. Es una burla lo que se ha hecho con las familias y los dependientes en Castilla-La Mancha”, manifestaba Gil, quien destacaba que “hay elementos que son para la preocupación y que además es que tienen alternativas viables”.
Cuatro años en los que, a los que discrepan, «se les ha criminalizado para que nadie haga ninguna crítica a las acciones del Gobierno del PP». Un Gobierno que «ha ocupado todo lo público: El manoseo de la Radio Televisión Pública, los cambios de la ley electoral…».
SIN ESPACIOS PARA LA DISCUSIÓN
«Lo más grave no es que no haya habido acuerdos, es que simplemente no se ha podido hablar, no ha habido espacios para la discusión. No se ha podido hablar en cuatro años del gobierno del PP», reconocía Gil, quien hacía un llamamiento a la ciudadanía de cara al 24 de mayo para que el voto «permita cambiar la política y el gobierno porque hemos podido constatar con un sufrimiento amplio lo que ha pasado estos cuatro años».
Y UNA SÚPLICA
De cara a las elecciones, Gil suplicaba a las fuerzas políticas «un esfuerzo por conformar una mayoría progresista en las Cortes que rescate a las personas, que devuelva la autoestima a la región y que podamos recuperar la confianza en la acción política. Es la única manera de acabar con las políticas ultraconservadoras».
Tras este balance, Gil ni daba un aprobado a la gestión de Cospedal ni a la de sus consejeros, aunque confesaba que lo único que sabía de la gestión de estos ha sido la que se ha mostrado públicamente.