Grupo Tello, empresa de Toledo y una de las cuatro homologadas en España para vender en Rusia, apuesta por la repercusión en mercados alternativos como medida para frenar las pérdidas producidas por la paralización de las exportaciones a este país.
En un comunicado de prensa, el director general del Grupo, Alfonso Alcázar, explica que «el mercado ruso nos supone una facturación de más de dos millones de euros al año. La prohibición de comercializar durante un año productos frescos y elaborados de cerdo desde el pasado día 7, lo repercutiremos en el resto de los 39 ó 40 mercados internacionales en los que ya comercializamos nuestros productos; Aun así, la medida política rusa es muy desfavorable para los intereses del sector».
Pese a todo, Tello, con sede en el municipio toledano de Totanés, en los últimos tres años, ha conseguido un crecimiento acumulado de un 34 por 100. El 2014 se cerrará con una facturación global de 94 millones de euros. Del 2011 al 2012 incrementó sus puestos de trabajo en un 1,6 por 100; del 2012 al 2013 el aumento ha sido del 6,4 por 100, destaca Alcázar.