El Gobierno de Castilla-La Mancha estima que en 2014 se producirá el cambio de tendencia en la economía regional y prevé que en los próximos años crecerá por encima de la media española recuperando en parte el terreno perdido durante el período de recesión económica.
Así consta en el Informe Económico y Financiero que acompaña a los Presupuestos de la Junta presentados por la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal.
Dicho informe, consultado por Efe, parte de la previsión de que Castilla-La Mancha terminará 2013 con una caída de la economía del 1,7 % y que en 2014 retornará la senda del crecimiento con un alza del 0,4 %, una décima menos que la media nacional.
Se trata de un escenario un poco menos optimista que el reflejado por el servicio de estudios del BBVA, que prevé que Castilla-La Mancha crezca un 1 % en 2014, ya por encima de la media nacional.
El Gobierno regional cuenta con que, pasado 2014, «previsiblemente», la economía regional «crecerá en próximos ejercicios por encima de la media española recuperando en parte el terreno perdido durante el período de recesión económica», en los que la caída de la economía ha sido superior a la media.
Entre los factores en los que se apoya esa recuperación a medio plazo, la Junta cita el sector exterior, una cierta recuperación de la demanda interna y la necesidad de menores ajustes fiscales.
Según los datos recabados por Efe de ese informe, el déficit presupuestario previsto en 2014, entendido como la diferencia entre ingresos y gastos no financieros, es de 788 millones de euros.
Pero a esa cantidad hay que restarle los ajustes por reintegro de liquidaciones negativas aplazadas del sistema de financiación autonómica de ejercicios anteriores, por importe de 260 millones de euros, y el resto de ajustes para adaptar esa cifra a términos de contabilidad nacional, que se estiman en un importe neto de 161 millones de euros.
De ese modo, la necesidad de financiación resultante, expresada en términos de contabilidad nacional, es de 367 millones de euros, equivalente al 1% del PIB regional estimado para 2014, lo que permitirá el cumplimiento del objetivo de estabilidad.
Los 788 millones de euros de déficit, sumados a los 1.057 millones de amortizaciones de deuda, llevan a un endeudamiento bruto de 1.845,62 millones de euros el año próximo.
La mayor parte de ese endeudamiento corresponderá a la renovación de créditos que vencen en 2014, así como a la financiación del déficit no financiero de 367.
Además, la Junta asumirá la mayor parte del endeudamiento del sector público regional (140 millones de euros) y vencimientos de la línea ICO-Comunidades Autónomas por importe de 156,33 millones de euros.
En este sentido, la Junta apunta en el informe que, a 30 de junio de 2013, Castilla-La Mancha, pese a ser de las regiones más endeudadas, registraba un nivel de endeudamiento del 28,20% del PIB, siendo una de las comunidades autónomas que se situaban aún dentro del objetivo marcado para 2013, del 29,80% del PIB.
En cuanto a los ingresos, el Informe plantea que la estimación se ha hecho según «previsiones realistas, prudentes y ajustadas a la realidad económica».
El Gobierno regional prevé contar en 2014 con un total de 5.137 millones de euros para gastar según las prioridades que determine, cantidad que, sumada a los 538 millones previstos para el pago de intereses, da el techo de gasto de 5.675.