El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez, ha anunciado la derogación del decreto que declaró de Interés Regional los regadíos en Cancarix (Hellín) pues al no haber justificación técnica se va a estimar el recurso de los regantes y se declarará nula la pasada.
Así se ha pronunciado Martínez en Albacete, en una rueda de prensa con representantes de UPA en la que ha indicado que «ahora toca sentarse con la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS) para negociar» para «poner encima de la mesa que antes de los nuevos regadíos están los derechos de los actuales regantes que tienen necesidades de agua».
Ha recordado que esto sucedía con regantes de comunidades como la de Agramón, también en Hellín, y ha señalado que «es un tema importante porque no se pueden tomar decisiones de calado que tienen que ver con los agricultores de esta tierra con intencionalidad política, que es lo que se hizo en su momento, en fechas próximas a las elecciones autonómicas».
En este sentido, y a preguntas de los periodistas, ha explicado que el decreto «quedará sin validez» y que después se iniciará un nuevo procedimiento para que se puedan acoger los agricultores de regadíos sociales de la zona que denunciaron esta declaración.
AGUA DE MÁS CALIDAD
«Esto les va a suponer acceder a agua de más calidad que la que usan en la actualidad», ha detallado Martínez, quien ha agregado que «además, hablamos de 872 hectáreas que no son continuas y que son fundamentalmente de secano y no de hortícolas, como son argumento para declarar así una zona».
Ha reseñado que «los técnicos de la Consejería han visitado las parcelas y han comprobado que no hay justificación técnica en esa declaración que se hizo poco antes de las elecciones».
El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) de Castilla-La Mancha, Julián Morcillo, ha mostrado su satisfacción por esta decisión y ha recordado que «nosotros recordamos el atropello que se quería cometer contra los regantes que veían como en un procedimiento al que no tuvieron opción se pretendía derivar esta agua a una tierra en Cancarix que es un secarral».
«Entendíamos que los criterios no eran técnicos y así lo denunciamos, pues el terreno pertenecía a diez mercantiles, algunas con intereses políticos por medio», ha asegurado, como «también no entendíamos cómo un procedimiento en el que legalmente no se podía derivar el agua a esa tierra sin esa declaración, que era el trámite necesario para que pudiera llegar a esas tierras».
Morcillo ha expuesto: «Lo calificamos de pelotazo y veíamos que no se cumplía la ley de aguas», ha concluido.