El presidente de la Federación de Organizaciones de Profesionales, Autónomos y Emprendedores (OPA), Camilo Abiétar, ha reprochado al Gobierno de Castilla-La Mancha que haya derogado dos decretos de ayudas a autónomos sin consultarles y en medio de la crisis tan grave que atraviesan.
De hecho, en 2011 tuvieron que echar el cierre 26.500 empresas en Castilla-La Mancha, lo que supone el 16 ó 17 por 100 del total, ha lamentado Abiétar en una rueda de prensa en Toledo, donde ha criticado que llevan un año esperando poder reunirse con la presidenta regional, María Dolores de Cospedal.
«Es más fácil reunirse con Mariano Rajoy que con Cospedal», ha señalado el presidente de la OPA, quien ha añadido que difícilmente se puede hablar de autoempleo y de relanzar la economía cuando se derogan dos decretos de ayudas directas al empleo autónomo aduciendo que se recogerán en la ley de emprendedores, aunque el desarrollo de esta, ha dicho, es escaso y poco participativo.
Sí contaron con ellos cuando el Gobierno regional estaba elaborando el texto y desde la OPA aportaron sugerencias.
Sin embargo, ha continuado, desde entonces no les han informado de nada de lo que han hecho o van a hacer.
Abiétar ha mostrado su total disponibilidad a colaborar, aunque ha dicho que es difícil con un gobierno que «no escucha el sentir de la calle».
También ha dicho estar perplejo al oír que el Gobierno va a rescatar a la banca con 10.000 millones de euros de dinero público, y se ha preguntado quién rescata a las empresas, que son las que de verdad crean empleo.
Del mismo modo ha lamentado la «amnistía fiscal» porque supone un premio a los defraudadores.
Para cortar la competencia desleal, Abiétar ha dicho que desde su organización se prestan a dar los nombres y direcciones de los que así actúan porque los propios autónomos son los que mejor saben quienes están trabajando al margen de la ley.
Ha aplaudido que se «desatranque» el pago a proveedores de las administraciones públicas y que a mediados de junio se empiecen a librar las facturas.
En ese sentido, y aunque hay algunas facturas que no aparecen, Abiétar espera que el proceso se desarrolle con normalidad y sin trabas hasta que se paguen los 2.510 millones de euros en 600.000 facturas que la Administración debe a los proveedores.
En cuanto al futuro, el presidente de la OPA ha señalado que tras cerrar el año pasado con 26.500 empresas menos, en los tres últimos meses se ha producido un superávit, esto es, se han creado más empresas de las que se han disuelto.
No obstante, ha dicho que hay que ser prudentes porque es algo que suele pasar en Semana Santa y antes del verano, por lo que hay que esperar a ver los resultados de septiembre y octubre para comprobar si la tendencia es positiva.