La organización agraria Asaja de Toledo ha denunciado «importantes daños» en el viñedo a causa de la plaga de conejos y ha pedido a la Consejería de Agricultura que estudie la posibilidad de permitir instalar mallas conejeras, que son más tupidas que las cinegéticas, para impedir el paso de los conejos.
En un comunicado de prensa, Asaja de Toledo explica que la alta densidad de conejos está ocasionando «importantes daños» en explotaciones de viñedo, sobre todo en las situadas cerca de vías de comunicación o próximas a ríos y arroyos, que son áreas de seguridad en las que la falta de limpieza facilita la proliferación de madrigueras.
Según Asaja, los conejos se comen los racimos de uva y roen la madera de las cepas y las yemas, algo que puede afectar al rendimiento de la vid en esta campaña y también el próximo año.
En esta situación, Asaja de Toledo ha pedido a la Consejería de Agricultura que agilice las autorizaciones de control de plagas en los municipios afectados y que estudie la posibilidad de permitir la instalación de mallas conejeras, que son más tupidas que las cinegética.
La organización agraria quiere que las mallas se instalen a mayor profundidad para que sean eficaces y destaca que además del viñedo se están viendo afectadas parcelas de maíz y plantaciones jóvenes de olivar.
Asaja se ha reunido con la consejera de Fomento, Marta García de la Calzada, que ha mostrado su disposición a informar al Ministerio de Fomento de la situación, según la nota de prensa, y mantiene contacto con los presidentes de las Confederaciones Hidrográficas del Guadiana y del Tajo.
Asaja recuerda que ya a principios de año, cuando la Junta aprobó el Plan de Emergencia Cinegética para atajar la sobrepoblación de conejos, avisó de que se necesitaba la implicación de los organismos encargados del mantenimiento de las áreas de seguridad -Ministerio de Fomento, empresas concesionarias de autopistas y AVE y confederaciones hidrográficas- para controlar la plaga.
Entre los municipios más afectados están aquellos por los que pasa la autopista AP-36 y la autovía A-40, así como los enlaces de las mismas, como La Villa de Don Fadrique, Villatobas, Ocaña, Santa Cruz de la Zarza y Quintanar de la Orden.
Asaja insiste en aparte de los daños a la agricultura, la proliferación de túneles por debajo de las infraestructuras podría provocar en un futuro corrimientos de tierra que pongan en riesgo la seguridad vial, según ha advertido la presidenta provincial de Asaja, Blanca Corroto, a la consejera de Fomento.