Liberbank, el grupo formado por Cajastur-Banco CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura, estudia abrir sucursales más grandes en aquellas zonas en las que cuenta con un gran número de clientes y una alta concentración de oficinas.
Fuentes de la entidad han explicado a Efe que apuestan por un nuevo modelo comercial, más centrado en las pymes y capaz de dar un mejor servicio a sus clientes, y por eso actualmente se estudia cómo optimizar unas 268 oficinas con unos 700.000 clientes.
Esta muestra incluye sucursales pequeñas que, en muchos casos, se encuentran a escasos metros entre sí, por lo que se baraja la posibilidad de concentrar algunas de ellas en oficinas de mayor tamaño y más personal, en las que pueda ofrecerse un mejor servicio.
Aunque la entidad aún no tiene una decisión tomada, aclara que no se está pensando en ningún caso en cerrar 268 sucursales, sino en reorganizar estas oficinas para que sean más grandes y puedan dar un mejor servicio, sin que ello suponga la pérdida de nuevos empleos.