El Gobierno de Castilla-La Mancha quiere instalar 100 nuevos cajeros automáticos en municipios pequeños de la región. Es una apuesta de Recamder (Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha) ante las demandas de los vecinos de pueblos como Ocejón, en Guadalajara, donde el banco que hay no va a mantener su oficina.
«Hay que dar este servicio y garantizar que los mayores puedan sacar su pensión y tener efectivo para ir a la tienda a comprar, algo que ahora mismo no pueden hacer en muchos municipios», ha señalado Jesús Ortega, presidente de Recamder, que se muestra satisfecho por traer de vuelta los cajeros automáticos, que se van a instalar en municipios de «intensa y extrema» despoblación dentro de Castilla-La Mancha. Además, desde Recamder afirman que van a implementar un plan de formación para que los mayores aprendan a utilizarlos.
Stop a la despoblación: más de 200 medidas para vivir, con garantías, en los pueblos
«No es la panacea, pero es una solución»
Ortega ha reconocido que la medida «no es la panacea, pero es una solución». En unos días se firmará el convenio con la empresa adjudicataria para instalar los nuevos cajeros. «Ojalá se pudieran colocar más oficias, pero eso ya no son decisiones nuestras».
La pregunta es en qué localidades se van a instalar. Los Grupos de Acción Local se van a encargar de elegir las ubicaciones, para que cada nueva instalación cubra un radio de diez kilómetros y se instale en un pueblo huérfano de cajero.