Los trabajadores de Heliocolor se han concentrado hoy a las puertas del juzgado de lo mercantil para pedir una solución al impago de tres meses del salario por parte de la empresa, que está en concurso de acreedores, y temen su próximo cierre que dejaría en la calle a 230 empleados de la plantilla.
Tras varias jornadas de huelga por los retrasos e impagos de nóminas, la desconvocaron tras conocer que se encontraba en concurso de acreedores.
El futuro está complicado porque desde hace tres semanas se han ido la mayoría de los clientes, con lo que tenemos poco trabajo, y si no conseguimos que esos clientes vuelvan a la empresa, esta no tienen viabilidad», ha señalado hoy el presidente de comité de empresa de Heliocolor, Rafael Urrea.
Actualmente, ha añadido, apenas tienen clientes, «Diez Minutos y Carrefour pero todos los demás, Hola, Alcampo y todos los del grupo Vocento se han marchado en el último mes».
«Seguimos trabajando porque no tenemos otro remedio y más ahora en un concurso de acreedores», ha dicho Urrea, quien ha afirmado que el administrador único de la empresa lleva dos meses desaparecido, «no sabemos ni donde está».
Los empleados están realizando estos días concentraciones tanto en Guadalajara como en Madrid, en la sede de Serpa Capital, antigua propietaria de la empresa, que consideran «son los máximos responsables de la situación de nuestra empresa, del concurso de acreedores después de que nos adquirieran en 2012 y lo único que han hecho es expoliarnos y descapitalizar la empresa».
De ser una de las empresas más consolidadas de Guadalajara, desde 1991 ha sido vendida hasta en siete ocasiones hasta llegar a la situación actual pero «el problema ha sido la mala gestión», ha lamentado.