«Carne fresca procedente de corderos exclusivamente de la raza ovina Manchega, sin distinción de sexo», así define la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Cordero Manchego un producto al que se dedican más de 400 ganaderías de toda la región.
La superficie territorial amparada por la indicación geográfica protegida «Cordero Manchego» es de 46.703,61 kilómetros cuadrados repartidos entre Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
En el año 2014, según los datos de la IGP Cordero Manchego, un total de 424 ganaderías se dedicaban a este alimento castellanomanchego y 302.226 ovejas. A ello hay que sumar los tres cebaderos, los siete comercializadores y los tres mataderos. Desde la IGP esperan que este año la producción ronde el millón y medio de kilos, si bien la cifra aún no está cerrada.
La IGP establece una serie de parámetros para garantizar que el producto es originario de la zona. En este sentido, «la carne procederá de corderos exclusivamente de la raza «Manchega», nacidos y criados en ganaderías inscritas en los registros de la Fundación Consejo Regulador de la IGP Cordero Manchego, situadas en la zona de producción».
Por otra parte, «los corderos serán identificados con un crotal que contendrá el código de explotación de la ganadería de origen y el logotipo de la Fundación Consejo Regulador de la IGP Cordero Manchego».
«Los corderos permanecerán en la explotación hasta su traslado a otra explotación de la zona de producción o al sacrificio».
Además, «el sacrificio o manipulación de los animales se realizará en centros inscritos en los registros de la Fundación», así como el oreo, conservación y despiece de canales que se realizará en industrias inscritas en la Fundación.
Además, de cara al consumidor, éste diferenciará el producto por su etiqueta, distintivo o precinto numerados con el sello de la Fundación.