El número total de viviendas que hay en Castilla-La Mancha es de 1.251.760, según los datos del Ministerio de Fomento y que corresponden al año 2009. Este millón representa el 4,9 por 100 de los casi 25,6 millones que existen en España.
Por provincias, algo más del 33,7 por 100 del total de las viviendas castellano-manchegas se encuentran en Toledo, le sigue Ciudad Real (23 por 100), Albacete (17,5 por 100), Guadalajara (13,5 por 100) y, finalmente, Cuenca (12,4 por 100).
El parque de viviendas en Castilla-La Mancha ha crecido en los últimos años. Desde 2001, año que se considera generalmente como el de inicio del último ciclo alcista de la construcción residencial, el número de viviendas ha acumulado un aumento de casi el 27 por 100; 5,1 puntos más que el experimentado en el conjunto de España.
En 2009 también se produjo un incremento en la región (3,1 por 100) claramente superior al nacional (1,7 por 100).
Toledo, con casi el 39 por 100 acumulado desde 2001, y Guadalajara, con el 34 por 100, han sido las provincias con el mayor aumento del parque inmobiliario regional.
LOS PRECIOS MÁS BAJOS
A finales de 2010, en Castilla-La Mancha el precio de vivienda libre (tanto nueva como usada) se situaba en 1.239,1 euros el metro cuadrado, según datos del Ministerio de Fomento. La región se posicionaba así como la segunda comunidad, después de Extremadura, con los precios medios de la vivienda libre más bajo.
Por provincias, Guadalajara, con 1.593,3 euros por metro cuadrado ha sido la provincia con los precios más elevados y la única en la que se superaba la media regional. Albacete, con algo más de 1.233 euros por metro cuadrado, ocupaba la segunda posición; seguida por Toledo, con 1.185 euros por metro cuadrado, y Ciudad Real, con 1.012 euros por metro cuadrado. Cuenca registró unos precios notablemente inferiores (994 euros por metro cuadrado).
En cuanto al precio de la vivienda usada, éste fue significativamente inferior al de la nueva. Concretamente, a finales de 2010 el precio de la primera representaba el 82 por 100 del precio de la segunda, algo que contrasta con la situación del conjunto del país, donde los precios de ambos tipos de vivienda eran prácticamente iguales. Respecto a 2009, cayeron un 0,7 por 100.