Dentro de un año para olvidar en el sector automovilístico español, las firma de automóviles Renault y Seat tiene para sí un posible consuelo, si lo quisieran utilizar: el volumen «Renault Mégane», de la primera, y la marca Seat fueron los más vendidos en un ejercicio que pasará a la historia por lo malo, ya que las ventas nunca habían sido tan malas desde el año 1993, con un caída del 18 por 100 negativo respecto al pasado año, según los datos recogidos por el diario «El País» facilitados por la patronal de fabricantes Anfac y de vendedores Ganvam.
Los datos facilitados por las patronales mencionadas del sector recogen que el modelo más vendido fue el «Renault Mégane», con 35.597 coches vendidos en toda España, seguido por el Seat Ibiza, con 31.106 y el Citröen C4 con 28.825.
Por lo que se refiere a las marcas más vendidas, la que se lleva la palma de las mayores ventas aun en un año tan nefasto es Seat, con un total de 73.524 automóviles, seguida por Volkswagen, con 71.608, y Ford, con 64.928.
Ya en el conjunto de las ventas, España acabó 2011 con 808.059 matriculaciones, lo que supone la mencionada caída del 18 por 100. Siempre según lo que se desprende de los datos aportados por Anfac y Ganvam, el año fue peor para las familias que para las empresas, dado que las ventas particulares cayeron un 33,6 por 100, mientras que para las empresas y los alquiladores subió un 6 y un 4 por 100 respectivamente, lo que paró el golpe.
Además, las compras de los particulares perdieron peso en el conjunto, ya que ahora representan el 48 por 100 de las ventas, cuando en 2007 representaban el 60 por 100 del total.
El estado calamitoso de la venta de coches, un termómetro tradicional de la economía de un país, evidencia que el final de la crisis aún está por llegar.