El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, participaba en el Espacio Reservado de Encastillalamancha donde recordaba que, pese al «duro» proceso de ajuste que ha vivido la región, se ha conseguido eliminar un «ingrediente importante», como son los intereses de la deuda que «dependen de la gestión pasada -refiriéndose a la etapa socialista en la Junta- que generó mucha deuda» y recalcaba que «no tienen que ver nada con la gestión actual». Al mismo tiempo puntualizaba que la economía vive ya una nueva etapa.
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El consejero de Hacienda, Arturo Romaní, destacaba que «Castilla-La Mancha es la que menos déficit ha tenido entre todas las comunidades» y «la que mejor gestiona su presupuesto». Además, puntualizaba que ahora comienza una nueva etapa económica, porque «está terminada la crisis económica y se inicia una etapa de crecimiento y empleo que en Castilla-La Mancha se va a producir por encima de la media nacional».
El consejero hacía estas declaraciones ante más de 250 invitados al Espacio Reservado, evento patrocinado por Globalcaja y Construcciones Sarrión, al tiempo que aseguraba que «me he enfrentado, junto al Gobierno, a la peor hacienda pública española», refiriéndose a que se encontró con unas «cuentas tóxicas», si bien decía que «no hay más secreto que lo que pagamos hoy lo podamos pagar mañana, pero ha sido necesario un importante trabajo político».
Con trabajo «duro» han llevado a Castilla-La Mancha a ser la comunidad que menos déficit tenía en 2012 y 2013, sin contar con el pago de los intereses de la deuda y otros acontecimientos, como ocurrió en 2013. En este sentido, explicaba que el año pasado se computó como déficit la devolución de 212,3 millones de euros a las compañías eléctricas por el Impuesto sobre determinadas actividades que inciden en el medio ambiente ingresado entre 2001 y 2012 y anulado por el Tribunal Constitucional y los 65 millones de euros que se deben abonar a la Seguridad Social por la regularización del IVA de obras entregadas entre 2007 y 2011, apunta EFE.
«Se ha hecho un esfuerzo enorme entre todos, pero ha merecido la pena», ha aseverado Romaní, quien indicaba que «lo que estaba en juego era la sostenibilidad».
Al mismo tiempo, Romaní aprovechaba para destacar un aspecto que considera que es mejorable, el de «la conciencia fiscal». En opinión del consejero, «la asignatura pendiente es mejorar la conciencia fiscal» y puntualizaba que «el verdadero patriota es el que paga bien sus impuestos».
Hasta que el aprobado en dicha asignatura llegue, «trabajamos por tener los impuestos más bajos posibles, se pagan mejor los impuestos cuando no son confiscatorios y se tiene la sensación de hacer una buena gestión» y concluía su intervención asegurando que en Castilla-La Mancha «los impuestos están bien gestionados y se dedican a lo esencial y fundamental».