La sección sindical de UGT en el call center de Atento Toledo, que avisa a la empresa con paralizar la actividad “si continúa exponiendo a la plantilla a un riesgo innecesario de contagio por COVID-19”.
En este sentido, Leticia Jiménez, secretaria del Comité de Empresa, señala que la legislación laborar contempla que “los trabajadores y trabajadoras pueden negarse a ir a trabajar si se presenta un riesgo grave e inminente para la salud, algo que sucederá con seguridad si la empresa sigue exigiendo a más trabajadores volver al centro de trabajo por la ineficacia del sistema de teletrabajo”.
«Ofreció teletrabajo y ahora les pide volver»
De acuerdo con el testimonio de Jiménez, “la empresa ofreció trabajar desde sus casas a parte de los teleopoeradores hace dos semanas y ahora les pide volver a sus puestos porque el teletrabajo no está funcionando, algo que es debido a los escasos medios por su parte”.
“No se puede exigir de la noche a la mañana que los trabajadores tengan en sus casas conexión FTTH, un ordenador con menos de seis años y Windows 10”, afirma.
[ze_summary text=»“No se puede exigir de la noche a la mañana que los trabajadores tengan en sus casas conexión FTTH»]“No se puede exigir de la noche a la mañana que los trabajadores tengan en sus casas conexión FTTH[/ze_summary]UGT propone servicios mínimos a través del teletrabajo, “como lo están haciendo en el resto de provincias en las que Atento tiene sus centros”.
“Se da el caso de que los servicios principales de este centro son la atención al cliente basada en la explicación y gestión de la factura, que puede reclamarse incluso tres meses después, y la venta de productos de Fusión del operador Movistar; servicios que desde UGT no consideramos esenciales de manera generalizada y que pueden cubrirse manteniendo un mínimo de trabajadores en teletrabajo”, afirma Jiménez.
Asimismo, Comisiones Obreras ha llamado también la atención sobre esta empresa y sobre el resto de trabajadores del sector:
CCOO, en un comunicado, ha señalado que algunas de las plantillas que atienden tareas consideradas esenciales mantienen el trabajo presencial mientras que las demás están ya teletrabajando, pero en muchos casos los trabajadores tienen que aportar su propio ordenador, datos e incluso el programa o aplicación que usan en sus respectivas empresas.
El sindicato ha indicado que un centro de atención telefónica no es un servicio esencial por sí mismo, pero sí lo son algunos de los servicios que prestan para las administraciones públicas y para determinadas empresas que, según el Real Decreto 10/2020 son esenciales. Sólo en estos casos está permitido el trabajo presencial.
Jazzplat, Atento, Digitext y Accepta
El mayor centro de llamadas de la región, el de Jazzplat en Guadalajara, que emplea más de 1.200 personas, ya implantó el teletrabajo hace dos semanas y facilitó a toda su plantilla tanto ordenadores como datos, y su aplicación para atender las tareas desde casa.
El de Atento en Toledo, con unas 500 personas en plantilla, tuvo graves complicaciones en un inicio, e incluso se requirió la presencia de la Inspección de Trabajo y de la Policía Nacional; pero se han ido solucionando, ha explicado CCOO.
Además de asegurar el distanciamiento personal, la desinfección de áreas de trabajo y la disponibilidad de gel desinfectante -las recomendaciones pautadas por la Inspección de Trabajo-, Atento trató de reducir el trabajo presencial en la planta de Toledo; y la semana pasada aproximadamente la mitad de la plantilla empezó a teletrabajar.
Digitex, ubicado en Talavera de la Reina, tiene unas 300 personas en plantilla, de las cuales aproximadamente 260 están teletrabajando, algunas con equipos facilitados por la empresa y otras con medios personales, y el resto de la plantilla está con excedencias o bajas.
Peor, según CCOO, es la situación en la empresa Accepta Servicios Integrales, de Albacete, que ha enviado a teletrabajar a las 175 personas que tiene empleadas, pero no les ha facilitado ningún medio, tienen que utilizar sus propios ordenadores, teléfonos y datos y hay algunos trabajadores que no tienen esos medios y de momento están en un limbo laboral.
Respecto al 112, con dos centros de trabajo en Toledo -uno junto a la plaza de toros y otro en la carretera de Madrid, con unas 40 personas en cada uno de ellos-, atiende emergencias, urgencias, información de utilidad pública programada y, ahora, con una línea 900 dedicada íntegramente a llamadas sobre coronavirus.