Un Plan de Empleo que se prolongará durante los dos próximos años, que contará con una inversión inicial de 224 millones de euros (aunque se espera que se movilicen 345 millones al final) y que servirá, supuestamente, para crear 60.000 empleos, tal y como ha anunciado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, durante su comparecencia ante los medios de comunicación en el Palacio de Fuensalida, sede del Gobierno regional.
Page, en el centro, junto a la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; y el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina.
Page ha calificado la rueda de prensa de excepcional «porque el empleo es la principal prioridad y preocupación de la sociedad y del Gobierno de CLM. El paro es el problema más serio que tenemos».
Por eso ha recalcado que este Plan de Empleo está pactado tanto con los empresarios como con los sindicatos «y es el plan más ambicioso en materia de empleo que se haya conocido en la historia de Castilla-La Mancha». En él participarán, siempre que así lo deseen, tanto los ayuntamientos como las diputaciones.
El presidente de la región ha incidido en que el borrador de este Plan se convertirá en las próximas semanas en una serie de decretos y se van a poder acoger a él tanto empresarios como autónomos, «además de que fomenta el autoempleo. Es un Plan muy completo».
La inversión pública de 224 millones saldrá «de los impuestos de los ciudadanos, pero sin incremento de la presión fiscal. Por ello hemos movilizado al mundo económico y este Plan prevé dinamizar 345 millones. Es un electroshock económico para ayudar a que haya más movilidad en la economía de la región, para que Castilla-La Mancha salga del adormecimiento».
Estará dividido en dos grandes bloques: irá dirigido principalmente a los jóvenes menores de 30 años y a los parados de larga duración, «con dos iniciativas potentes», ha dicho Page, «nadie se va a sentir excluido».
«NO QUEREMOS ESCAQUEARNOS, NO QUEREMOS MIRAR PARA OTRO LADO, QUIERO COLOCARME DELANTE DE LA MANIFESTACIÓN»
El presidente regional ha señalado que el empleo «no lo va a crear el Gobierno ni tiene por qué hacerlo, pero no queremos escaquearnos, no queremos mirar para otro lado, no queremos no asumir la responsabilidad, quiero colocarme delante de la manifestación. A mí no me valen solo las grandes cifras, sino que la recuperación le llegue a todo el mundo, especialmente a los que más lo necesitan».
Ha querido destacar que su Gobierno «ha recuperado una línea de acuerdo social perdida en los últimos cuatro años (los del Gobierno del PP); y el que presentamos hoy es un plan realista, cumplible, que se adapta a los mecanismos de financiación, no es humo, no es una filfa económica, no quiero dar la cara ahora para mañana tener que disimular. Y es un proceso pactado con los interlocutores sociales, los sindicatos y los empresarios».
Se ha referido también al Plan como el instrumento «que va a marcar la agenda política y económica de los dos próximos años. Porque CLM vuelve a tener un Gobierno que se preocupa por su tierra. Nosotros no vamos a mirar para otro lado en ningún problema que tenga que ver con la región, como el agua, el basurero nuclear… La única prioridad será la defensa de los intereses de nuestra tierra, y no hay nada que me importe más que lo que le pase a Castilla-La Mancha, por encima de los intereses del PSOE incluso a nivel nacional».
EL PLAN SERÁ EFECTIVO A FINALES DE AÑO EN ALGUNAS LÍNEAS PERO, PRINCIPALMENTE, DESDE ENERO DE 2016
El Plan de Empleo comenzará a ser efectivo, según ha explicado Page, dependiendo de la línea de actuación de la que se trate, «unas comenzará en los próximos meses y otras en enero de 2016». Los decretos se ultimarán a finales de septiembre y en plan se podrá poner en marcha a finales de año. Los contratos con los Ayuntamientos serán de seis meses y la ayuda a los parados de larga duración que sean mayores de 55 años se prolongará hasta que cumplan los 61, «es un puente hacia una jubilación digna».
Cuestionado sobre si cree que va a contar con la ayuda del PP para llevar a cabo este Plan, ha afirmado que «quien no ha hecho nada en materia de empleo en cuartro años pues… Les pediría a la oposición que no pongan palos en la rueda, que se sumen, que ayuden». Y un aviso a las diputaciones que no piensen participar: «Deben saber que lo que no quieran poner ellas lo tendrán que poner los ayuntamientos».
Y otro mensaje al PP: «Que me critiquen a mí si quieren, pero que apoyen el Plan, porque lo hemos planteado sin ningún milímetro de sectarismo».
La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha añadido que la primera percepción que ha tenido tras reunirse con los presidentes de algunas de las cinco diputaciones, entre ellas alguna del PP, «es que piensan que es un buen Plan y que lo van a apoyar. A cualquier diputación le interesa sumarse al Plan, no creo que ninguna no quiera formar parte de él».
Cualquier empresa de la región, sea del tamaño que sea, se podrá sumar al Plan y realizarán contratos de formación o aprendizaje, o contratos puente, «con el objetivo de que también las empresas sean las grandes beneficiarias».