Unas 150 personas, según la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Guadalajara, se han concentrado frente a la Delegación Provincial de Agricultura de la Junta para protestar contra el cierre «encubierto» de las Unidades Técnicas de Apoyo (UTAS) y las Oficinas Comarcales Agrarias (OCAS).
Así lo ha indicado a Efe el responsable de UPA en Guadalajara, Cipriano Ramiro, que ha explicado que a pesar de que técnicamente las UTAS y las OCAS de la provincia se mantienen abiertas uno o dos días a la semana se trata de un «cierre encubierto» ya que en su mayoría tienen un administrativo «sin los conocimientos técnicos suficientes» para prestar un servicio de calidad.
Según Ramiro, el sector agrícola requiere un servicio casi diario, ya que la Política Agracia Común (PAC) exige a los ganaderos y agricultores un montón de condiciones y ayudas para lo cual son necesarias numerosas gestiones que, poco a poco, se han dejado de prestar en las oficinas comarcales y se han centralizado en la Delegación de Agricultura.
«Para un ganadero, que trabaja 24 horas al día, es imposible. No tiene tiempo material para desplazarse a la capital», ha apuntado.
Por ello, ha pedido al Gobierno regional que reflexione sobre estas medidas que «no favorecen a nadie», ni al sector ni a la sociedad ni a los pueblos de la provincia, que «están condenando a la despoblación», ha lamentado
La concentración se ha desarrollado entre las 11:00 y las 13:00 horas bajo el lema «No al cierre de UTAS y OCAS, mantengamos los pueblos vivos» y los asistentes han protestado con cencerros y cánticos.