La vida de David Atienza Guerra es un canto al valor, al espíritu humano, al buen humor… En silla de ruedas tras el accidente de tráfico que sufrió hace 12 años, este diputado del PP por la provincia de Guadalajara en las Cortes de Castilla-La Mancha ha hecho del valor y hacia delante su máxima. Un ejemplo de recuperación humana que quiere transmitir a los demás.
¡Pero qué hace un andaluz en Alovera! Nació y vivió durante muchos años en Jerez de la Frontera (Cádiz), aunque residió por diversos lugares de España «porque mi padre montaba laboratorios fotográficos y estudios de diseño para empresas de cartonaje». Total, que al final terminó en Guadalajara porque para comprar una vivienda y tener familia era más barato que en Madrid.
Jugador de mus, «pero nada mentiroso porque se me nota rápidamente», uno de sus grandes aficiones es la música «de todo tipo, desde dance, clásica, pop, rock…». ¡Y madridista hasta más no poder! «Mourinho antes que Guardiola porque creo que le va mejor al Real Madrid», fue alcalde de Alovera de 2007 a 2011. Ganó en votos de nuevo pero un pacto le impidió repetir como alcalde el último 22 de mayo.
A la política llegó, curiosamente, «por accidente», como él mismo ironiza, cuando ya discapacitado montó la Asociación de Vecinos Independentista de Alovera «para luchar por los derechos de un barrio un poco abandonado por el PSOE». A partir de ese momento el PP se fijó en él y la historia fue rodada.
Hasta hoy…
¡Qué grande David!
¿Le pasa como a Francisco Vañó, diputado del PP en el Congreso, que dice: «Perdona que no me levante?
Pues sí. A veces también me sale. Sobre todo con las mujeres. Ja, ja, ja… ¿Que si se quedan sorprendidas? Yo creo que las mujeres entienden el sentido del humor que tenemos los discapacitados, ¿no? Es una forma de romper el hielo. Quieras o no, los discapacitados levantamos, un poquito, a veces, el sentimiento de pena y es una forma de cambiar esa primera sensación.
Vañó siempre ha dicho que la silla hay que sacársela de la cabeza y ponérsela en el culo… ¿Usted lo ha conseguido?
Creo que sí. Mi forma de ver la vida lo está demostrando. Cuando una persona no para de tener una vida tanto social como laboral está demostrando que la silla la tiene en el culo y no en la cabeza.
¿Suele hablar de lo que le sucedió?
No suelo hacerlo mucho. Lo tengo asumido y olvidado. Fue un accidente de tráfico, motivado principalmente por lo que sufren muchos autónomos en este país. Levantar una empresa es muy difícil, tienes que trabajar muchísimas horas, sábados, domingos, noches enteras… El cansancio se hizo con mi cuerpo, me quedé dormido en el coche y tuve el accidente. Fue hace 12 años.
¿Cuál es la anécdota más graciosa que le ha ocurrido desde que está en silla de ruedas?
Brrruuuu… ¡Hay muchas! La más llamativa fue cuando una mujer, en una tienda, se me acercó y me dijo: ¿Qué te ha pasado, hijo? La contesté que había tenido un accidente y ella, a su vez, dijo: Te vas a recuperar, ¿no? Contesté que sí, ¡algún día seguro que sí! Ja, ja, ja…
Fue el diputado que le dio la victoria a María Dolores de Cospedal en las elecciones autonómicas…
Eso dicen… Fui el número que le dio la victoria. El diputado número cinco por Guadalajara. Me tocó a mí y ese ápice de orgullo, evidentemente, lo tengo.
El PSOE ha cambiado, porque Emiliano García-Page ya no es José María Barreda. ¿Hay que mirar a la oposición de forma diferente?
Yo tampoco lo tengo muy claro… Page fue consejero, ¿no?, en la época de Bono y de Barreda. Yo creo que es más de lo mismo.
Usted perdió la Alcaldía de Alovera por un pacto político…
Sí. Gobiernan el PSOE y un partido alternativo con el beneplácito de IU. ¿Que si me sentó mal? Sí. Entiendo que la mayoría del municipio quería que siguiera gobernando el PP. De alguna manera se ganó en los despachos lo que no se había ganado en las urnas.
¿A qué diputado regional del PSOE ficharía para el PP?
¡Uff… Creo que a ninguno! Las propias siglas ya me impiden pensar que le voy a tener a mi lado. Ja, ja, ja… Pero no me llevo mal con nadie.
¿De qué le gustaría ser consejero?
¡Ufff…! Nunca me lo he planteado, pero igual de fiestas… Ja, ja, ja… Y de turismo.
¿Es muy fiestero?
Soy artista. Soy director de arte de profesión, tenía una agencia de publicidad y eso es lo que más me podía atraer.
Entonces diseñaba campañas de publicidad. ¿Hizo alguna llamativa?
Una de la que personalmente me siento muy orgulloso, pero… Yo fui el que lanzó a Fórum Filatélico, de alguna manera, a su éxito profesional. Yo diseñé el logotipo de Fórum y llevamos la cuenta durante muchos años.
¿A usted también le dejó «atrapado» Fórum?
Un poquito… Con un poquito…
Creo que baila sevillanas a las mil maravillas…
Sí, sí…
Y la gente se sorprenderá, claro.
La gente alucina. Sí, sí… Además las bailo bien, ¡qué quieres que te diga! Podía decir que soy el que mejor las baila en silla de ruedas de España. Ja, ja, ja… Me gustan mucho. Soy andaluz de pura cepa, llevo en el corazón a mi tierra y suelo bajar por allí cada vez que puedo. Tengo un abuelo con 96 años en Andalucía.
¿Está de acuerdo con la pena de muerte?
No.
Aparte de en el PP, ¿milita en alguna ONG o asociación?
En la asociación de discapacitados Aspaym como socio e intento colaborar con todas las asociaciones que me piden ayuda.
Sin trabajo ni prestación, ¿qué estaría dispuesto a hacer para comer?
El ser humano es capaz de hacer muchas más cosas de las que creemos que somos capaces. Alguien decía que el ser humano puede soportar mucho más dolor del que creemos. Y yo doy buena fe de ello. Haría cualquier cosa por sacar adelante a mi familia.
¿Prohibiría la prostitución?
Las prohibiciones no son buenas, pero sí habría que regular a este colectivo. Hay mucha desprotección de estas mujeres, sobre todo las que están en la calle.
¿Cuál fue su primer sueldo y en qué se lo gastó?
¡Fue hace tantos años! En 1987 ó 1988 y lo primero que hice fue comprarme un equipo de música en la calle Barquillo, en Madrid. Ja, ja, ja… Serían unas 150.000 pesetas.
¿Qué personaje histórico le gustaría ser?
¡Bufff…! ¡Hay muchos! A Julio César, a Carlomagno…
¿Con qué duerme? Si duerme con algo, claro.
Con mi mujer…
Nooo… ¿Con qué, no con quién?
Ja, ja, ja… Pues me gusta dormir abrazado a la almohada. Sin más.
La almohada y usted, sin nada de ropa por tanto.
Sí, sí, sí… Sin nada de ropa. ¡Como vine al mundo! Da igual que sea verano o invierno.
¿Qué libro está leyendo?
Varios. «Los Episodios Nacionales», de Galdós; y he empezado con «Los cuatro jinetes del Apocalipsis», de Blasco Ibáñez.
¿En qué película le hubiera gustado actuar?
¡Ufff…! Hummmm… En «La ventana indiscreta»… Por el símil. Ja, ja, ja…
Hubiera sido igual que James Stewart…
¡Lo hubiese intentado por lo menos! Ja, ja, ja…
Cuando va al fútbol, ¿insulta al árbitro o a los rivales?
No. Cuando voy a verlo no. Cuando jugaba de delantero tenía mis más y mis menos. Sí, sí… Jugué en el Alcalá de joven. La edad te va a haciendo más… En aquella época yo tenía muy mala leche, no me gustaba nada que me vacilasen ni un pelo. Ja, ja, ja…
¿Su mayor travesura?
¡He hecho tantas que no te podría decir! Una de las mayores, quitarle los tornillos de las fijaciones a un amigo cuando estábamos esquiando. Había que verle haciendo eses… Ja, ja, ja…
¿Qué programas del corazón ve?
Ninguno.
Defínase: ¿de derechas, de izquierdas o de centro?
De centro derecha.
¿Cree que el tamaño importa?
Yo creo que sí, peroooooo… ¡Otros dicen que donde esté una pequeñita y juguetona que se quiten las demás! Ja, ja, ja…
¿El juego del parchís es cosa de hombres? Se lo digo porque ya sabe aquello de que por lo general se comen una y cuentan 20…
Yoooo… Yo cuento menos de las que como. Ja, ja, ja…
¿Se atreve a decir el lugar más raro donde ha practicado sexo?
Puessssss… A ver que yo recuerde… Ja, ja, ja… Yo creo que en un parque.
¿En la oscuridad de la noche?
¡Por supuesto! De joven. Síííí… Ja, ja, ja…