Lo fue y lo consiguió todo como jugador de fútbol sala. Campeón de Europa, del Mundo y casi del planeta tanto con los equipos en los que militó como con la selección española, Andreu Linares es el protagonista de la Entrevista Irreverente de encastillalamancha.es.
Ahora entrena al Gelovisión Ciudad de Toledo y ha conseguido, cinco jornadas antes de terminar el campeonato, proclamarse campéon de su grupo en Tercera División, por lo que ya ha ascendido a Segunda B. Más allá de sus éxitos deportivos, este catalán que ya es más «bolo» que cualquier toledano de toda la vida, habla sobre el independentismo, la pena de muerte y muchas cosas más.
Por cierto, que físicamente le atrae una política. Rubia para más señas y…
Continúen…
Ganó todo lo posible, incluso lo imposible, como jugador tanto en los equipos por los que pasó como en la selección española de fútbol sala. Y ahora, en su etapa como entrenador, ha conseguido ascender a Segunda División B con el Ciudad de Toledo. Es catalán, un culé futbolero hasta la médula, y cuando le preguntamos por una posible independencia de Cataluña…
¡Ay, ay, ay…! La respuesta la van a tener mañana, cuando publiquemos completa la Entrevista Irreverente que le hemos hecho a Andreu Linares, quien fuera internacional con España y campeón de todo, en encastillalamancha.es, y de la que están leyendo un adelanto.
Por cierto, que su sueño es entrenar algún día a la selección. ¿Y quién es la persona que más le atrae físicamente? ¡Pues una política de la región con cargo y todo en la administración…! Ja, ja, ja…
No hubiera dado la orden de matar a Bin Laden, pero sí está a favor de la pena de muerte en un caso muy concreto. Y es que no tolera, ni aguanta ni soporta la pederastia, «¡ahí soy muy tajante!»; y de la primera vez que hizo el amor recuerda que…
Sigue admirando a Javier Lozano, quien fuera uno de sus entrenadores en su época de jugador y al que considera un padre; igual que al famoso periodista José María García, dueño de Movistar Inter Fútbol Sala, de quien recuerda que… Vamos, que cuando el entonces Interviú fichó a Andreu, éste quiso llevar la camiseta con el número 9, y fue cuando le dijeron que dónde iba, que si no sabía dónde había aterrizado… Ja, ja, ja… En la historia del club ningún jugador ha lucido ese número, porque está retirado y reservado para el propio García. Por lo que Andreu tuvo que coger el 7. No le quedaba otra…
Y esa ocasión en la que estaba en un hotel de Japón y de repente todo comenzó a moverse a su alrededor… Vamos, que no pudo pegar ojo en toda la noche hasta que a la mañana siguiente… Ja, ja, ja…
¿Quién es el mejor jugador de fútbol sala del mundo? Mañana, mañana…