sábado, 23 de noviembre de 2024
Entrevista Irreverente a Blanca Corroto, presidenta de Asaja Toledo 04/03/2016junio 7th, 2017

Una mujer con poder en un mundo, al menos cara al exterior, donde predominan los hombres. Y está encantada. Lo vivió desde muy pequeña en su pueblo, Navahermosa (Toledo) y hoy, con 43 años, es nada más y nada menos que la presidenta de Asaja Toledo. Como ella hay solo dos presidentas más en toda España y como ella misma afirma, va siempre de cara y es tan directa que a veces en las formas es un poco bruta, «casi como un arao; ja, ja, ja…». Es Blanca Corroto y lo que leen, la Entrevista Irreverente de encastillalamancha.es.
Entre sus aficiones, «me gusta mucho leer e ir al cine, soy cinéfila, y además suelo ir a ver muchas películas españolas para contribuir con el cine de nuestro país. Si hablamos de lectura, me gusta mucho María Dueñas, suelo leer todo lo que escribe y tuve la oportunidad de conocerla en un Día de la Región en Cuenca. Me acerqué a ella y fue supercariñosa y amable conmigo… También me encanta pasear por el campo, por las olivas, la sierra de mi pueblo es ideal para eso…».
Aunque el campo ha sido su vida desde siempre, entró en Asaja Toledo en febrero de 2003 como secretaria general, hasta que en abril de 2011 fue nombrada presidenta. En 2015 fue reelegida y ya veremos hasta cuándo, «porque yo no soy de que la gente se perpetúe en los cargos».
Sabe ordeñar cabras, le encantaría que Antonio Banderas le enseñara a bailar tangos, se emborrachó una vez y…
Lean…

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¿Quién ha sido el peor o la peor consejero/a de Agricultura que ha tenido Castilla-La Mancha?

Ja, ja, ja… Queeeee… ¡Qué malo eres! Todos malos, malos, malos del todo nooooo… Cada uno ha tenido sus cosas buenas y malas, pero malos del todo no hemos tenido ninguno de decir que han hecho una gestión nefasta. Evidentemente, unos lo han hecho mejor y otros peor.

¡Cómo me acaba de torear!

Nooooo… Ja, ja, ja…

¿Y el mejor o la mejor?

Pues aquí, en Asaja, siempre nos habréis oído decir que hubo una consejera hace muchos años que a esta casa le gustó mucho su gestión, que fue la de Mercedes Gómez (consejera del PSOE en 2003).

¿Echa de menos el Comité Ejecutivo de Fedeto?

No, no lo echo de menos, porque realmente… Ahí Asaja se sentía a gusto, bien, jamás me trató mal ninguno de ellos, las cosas como son, salvo que… Supongo que irás por lo de mi cese y tal, supongo que irás por ahí, pero yo hasta entonces no había tenido ningún problema con ninguno de ellos, al contrario, siempre fueron muy correctos y muy agradables conmigo. Y no tengo nada más que decir, César. Y no lo echo de menos porque cuando a uno, presuntamente, le expulsan o echan de un sitio por defender a los suyos, porque mi salida de Fedeto fue por defender a los agricultores y ganaderos de la provincia de Toledo, y se lo dije a ellos, al presidente y a todos los que estaban… Para mí es un orgullo que me expulsen de un sitio por defender a los míos. O sea que… Daño ninguno. Se ve que allí no teníamos cabida, decidieron eso y hasta luego. Una decisión respetable y punto.

¿Cuál de las dos Lonjas Agropecuarias, la de Fedeto o la de Asaja, funciona mejor?

Bueno, pues yooooo… Aquí no puedo ser objetiva, tengo que ser subjetiva. La que está funcionando mejor es la que tiene Asaja Toledo junto con cooperativas agroalimentarias, las transformadoras de pienso que en este caso son nuestros compañeros de viaje. ¿Por qué? Porque es donde se deciden los precios orientativos reales, precios orientativos reales, precios orientativos reales… Repito esto tres veces también por las famosas notas de prensa que salieron que si quería manipular el mercado, que si no sé qué… ¡No, por Dios, nunca más lejos de…! Nunca he tenido esa intención, lo único ha sido defender a los agricultores y a los ganaderos, que es la que sigo teniendo. Por tanto, nuestra Lonja es la que marca los precios orientativos reales.

¿Es la única mujer en un puesto ejecutivo en Asaja?

No. Hay otras dos presidentas más, la de Zaragoza, que se llama Emilia; y la de Barcelona, Rosa. Somos tres mujeres presidentas en esta organización, ¿eh?

Y cuando se juntan con el resto de presidentes hombres… ¡Las tres son las estrellas!

¡Somos las estrellas! La verdad es que con nosotras son unos auténticos caballeros, ¡nos tienen en palmitas! No tengo ninguna queja, al contrario.

¿Alguna vez le han dicho, dentro o fuera de Asaja, aquello de ¡váyase usted a fregar!?

No, jamás. Además, esta mañana precisamente tenía una conversación con una persona bastante influyente en el Gobierno de Castilla-La Mancha y se lo decía: jamás, ningún agricultor, pero ninguno y ya llevo años aquí… ¡Siempre me han respetado! Conmigo se han portado siempre francamente bien, con mucha educación y respeto, soy uno más de ellos. A mí me gusta que las cosas me las digan a la cara.

¿Se las dicen?

Me gusta la crítica constructiva y directa, efectivamente. Siempre digo que cuatro ojos ven más que dos. Tú intentas llevas la organización con todo tu corazón, tu ilusión, tu trabajo y siempre por el mejor camino que crees que lo tienes que llevar. Pero esto es como todo, hay decisiones que tomas unas veces acertadas y otras equivocadas. Pero a mí me gusta que la gente me diga qué es lo que ve que se está haciendo bien o mal, no por detrás. Yo también soy así, muy directa, y a muchos no les gusta.

¿Ser muy directa le causa problemas?

A veces sí. Yo no he aprendido todavía a ser diplomática, ésa es una asignatura… Hay veces que sí que tendría que decir las cosas quizás un poquito menos bruta. Soy un poco bruta…

¿Es más bruta que un arao?

Pues… ¡Casi! ¡Casi! Pero bueno… Yo soy directa. Hay personas a las que no les gusta que seas tan directa. A mí no me gusta que me mientan, por lo tanto no me gusta mentir. Por eso me gusta que me digan las cosas a la cara.

Anímeme y convénzame para que me haga agricultor…

Ahora, cuando el Gobierno saque los planes de mejora pues es una buena oportunidad para los jóvenes que se quieren incorporar al campo. El sector agrario es muy bonito. Siempre nos decís que si los agricultores lloramos, que si tal… No, no es cuestión de llorar. Lo que pasa es que vivir de la agricultura es muy duro y tenemos muchos problemas. Me hace mucha gracia porque cada vez que hay una reforma de la PAC (Política Agraria Común) dicen que va a haber menos papeles, pero es al contrario, cada vez que hay una reforma tenemos más burocracia de papeles, más normas que cumplir… Y lo que no tiene que olvidar nadie, ni los ecologistas, es que la persona que mejor cuida el medio ambiente es el agricultor, porque es de lo que vivimos. ¡Y eso no lo tiene que olvidar nadie!

¿Qué tal se llevan con los ecologistas?

Pues nada más que regular… ¡No nos llevamos más que regular! Porque sabes el problema que tenemos en la provincia de Toledo, en la zona de La Mancha, con la famosa ZEPA, y es que los ecologistas ahora dicen que las avutardas no pueden estar en un viñedo en espaldera, tampoco en este caso con los almendros… Bueno, yo a los ecologistas en los foros que coincidimos les digo que por qué no nos damos una vuelta por el campo, ¡todavía no hay ni una avutarda que se haya matado en una espaldera! ¡Ni una! Además, se tienen que dar cuenta de que si lo condenas todo a un cereal rabioso de qué van a comer esos animales. Las avutardas en verano se pasean por las viñas, comen uvas, beben de los goteos y van y vienen tranquilamente. ¡Todavía no se ha matado ninguna! Perfectamente se puede convivir con el medio ambiente, pero por favor… ¡Un poquito de moderación, que ya lo estamos llevando a un extremo! Es que esa zona la van a condenar a que los pueblos se queden sin gente, porque ahora mismo el cereal no es rentable y el agricultor que quiere seguir viviendo de esto tiene que diversificar su explotación.

¿Algún día va a dar el paso de entrar en política?

Pues es algo que ni se me ha pasado por la cabeza. A mí me enseñaron que nunca se puede decir de esta agua no beberé, pero… ¡Ni se me pasa por la cabeza!

¿Le han ofrecido, alguna vez, entrar en política?

Sí. Y dije que no. En 2011, antes de presentarme a las elecciones para la Presidencia de Asaja Toledo. Me lo ofrecieron, pero lo decliné.

¿Quién se lo ofreció?

¡No te lo voy a decir!

Ja, ja, ja… ¿Y el puesto que le ofrecieron tampoco me lo dice?

¡No! Ahí lo dejamos…

¿Por qué se hizo de Asaja y no de UPA o de COAG, por ejemplo?

Pues porque mi padre ya venía, antes de que Asaja se fusionara con las organizaciones agrarias hace 30 años, de los jóvenes agricultores. Y es lo que yo he vivido.

Pídale lo que quiera al consejero de Agricultura, Desarrollo Rural y Medio Ambiente…

¡Que arregle lo de la ZEPA! Es una de las cosas que más nos preocupa a esta organización. Y que busquemos una solución para estos ganaderos de vacuno de leche, que no les recogen… Aunque a día de hoy la empresa va a seguir recogiendo.

Confírmeme o desmiéntame un mito, que hay vino de Castilla-La Mancha que se embotella con el nombre de otras comunidades autónomas como si lo hubieran producido ellas…

Sí, todavía sigue saliendo vino de esta región a otras comunidades. Vino a granel. No es que se venda, se llevan una cisterna de vino de Castilla-La Mancha y llega a su destino, a otra comunidad, y hacen un coupage con otras variedades. Lo mezclan con las variedades que tengan allí.

Ya que hablamos de vino, ¿se ha emborrachado alguna vez?

¡Pues sí, hace muchos años y no he vuelto! Precisamente por eso. ¡Qué mala! Fue durante mi cumpleaños, el 16 de mayo, y suele coincidir con la romería de La Milagra en Navahermosa, mi pueblo, y esa noche nos fuimos a cenar un grupo de amigos. Quien me conoce sabe que no bebo nada de alcohol. Yo ya estaba saliendo con mi marido, entonces era mi novio, y un poquito de cerveza… Le empecé a decir: Vicente, estoy un poquito mareada… ¡Un poco mareada que me emborraché! ¡Y no he vuelto! Me daba vueltas todo, ¡qué mala! ¡No me verás ni beber cerveza!

¿Quién fue su primer amor y a qué edad?

Buenoooooo… ¿Cuántos años tenía yo? Creo que 15 ó 16. Sí. Ya pasó a la historia. Y el segundo amor, con el que estoy casada, que es mi marido. ¡Mi vida es muy corta en amores! Yo empecé a salir muy joven con mi marido y de momento… Hasta hoy.

¿Le han dado muchas calabazas amorosas?

No. ¡Yo sí he dado! Pero a mí no. ¡Siempre he sido muy tímida y cortada! Pero yo he dado, sí… A mi marido le hice que sufriera un poquito. Ja, ja, ja… Estaba él en Navahermosa con sus amigos tomando algo y yo me iba a otro bar con mis amigas. Y él iba detrás. ¿Es que no has visto el coche en la puerta?, me preguntaba… ¡Porque no he querido!, le decía yo. Ja, ja, ja…

¿Usted hubiera dado la orden de matar a Bin Laden?

No. Fíjate que… Es odio lo que todas las personas sentimos por él, pero matar… Meterle en un calabozo y que no saliera el resto de sus días, sí.

¿Alguna fobia confesable?

Lo que tengo es vértigo. Pero vértigo, vértigo… ¡Lo paso fatal! Luego ya… Y fobia, fobia, fobia… Si veo una rata me pone descompuesta.

¿Es partidaria de que las parejas de homosexuales adopten niños?

Sí, no veo por qué no.

¿Alguna anécdota en un viaje?

Un viaje a Rumanía por trabajo, cuando bajamos del taxi, le pagué y en vez de darme la vuelta salió pitando. Me quedé sin vuelta, claro.

¿Algo desconocido de Blanca Corroto que nos sorprendería?

Yo sabía ordeñar cabras, ¿eh? Mi padre tenía ovejas y siempre llevaba 30 ó 40 cabras. La oveja no fui capaz de ordeñarla, pero las cabras no se me daban mal… Porque la cabra tiene las ubres más grandes y las ovejas más pequeñitas, era más difícil y debías tener como más sensibilidad con los dedos. Y yo no era capaz, pero a las cabras sí.

Sea sincera, ¿qué piensa de los periodistas?

Pues hombre, hay periodistas de todo tipo. Hay muchos que sóis unos grandes profesionales, pero hay otros que dejan mucho que desear. Hay un poco de todo, como en la viña del señor. Afortunadamente, sóis más profesionales que menos.

¿Cuál fue su primer sueldo?

Cuando terminé la carrera estaba deseando ponerme a trabajar. Mi madre, que en paz descanse, me decía que no me preocupara, que ellos me daban para mis gastos, pero yo deseaba trabajar y lo hice de comercial en una compañía de seguros. Gané 50.000 pesetas al mes. Me puse más contenta que unas castañuelas, le hice un regalo a mi madre…

¿Alguna vez ha cobrado en B?

No.

¿Tiene algún tatuaje o piercing?

No. Los tatuajes… A mí las agujas es que me dan un poquillo de miedo, me dan yuyu. Sí he pensado alguna vez hacerme un pequeño tatuaje discreto en la muñeca, pero la aguja me echa para atrás. Y los piercing… ¡Imagínate! Por lo mismo… A mí no me disgusta ver a la gente con tatuajes, no…

En caso de necesidad, ¿qué estaría dispuesto a hacer? Uno, robar para comer; dos, prostituirse para comer; o tres, engañar a Hacienda.

Ja, ja, ja… ¡Engañaría a Hacienda! Robar sería lo… Prostituirme… Yo respeto a las personas que lo hacen, pero antes hago otra cosa que eso. Y robar lo mismo. Engañaría a Hacienda, como cualquiera, ¿no? ¡Aunque ahora Hacienda nos engaña! Buen cuidado podemos tener que te están haciendo revisiones de todo…

¿Con quién le gustaría echarse un bailecito?

No soy yo muy buena bailarina. Antonio Banderas no es bailarín, pero yo le he visto bailar en alguna película y, hombre, no me importaría bailar un tango con él. ¡Y que me enseñara, claro, porque no sé bailarlo!

¿Pena de muerte sí o no?

No. Que no salgan, lo que quieras, pero pena de muerte no.

¿Ha robado alguna vez?

No. Así que me acuerde… Pues no. A lo mejor, cuando era pequeña si cogí alguna gominola o algo…

Y a usted, ¿le han robado?

Sí. El monedero, en la antigua oficina de Asaja. Soy muy despistada y Yolanda siempre me decía, y me sigue diciendo, que tuviera cuidado con el bolso. Alguien que vino de fuera se llevó mi monedero. Con tan buena suerte de que… El dinero no lo dejaron, pero alguien llevó el monedero a la Policía y ésta se puso en contacto conmigo. Al menos estaban las tarjetas, la documentación… Euros ninguno, pero fui una afortunada, estaban las tarjetas.

¿El famoso que más le atrae físicamente?

Si fuera mi marido te diría que la Jennifer Aniston, pero yo ahora mismo así famoso que me atraiga… A mí, Brad Pitt.

¿Qué nos puede contar de la primera vez que hizo el amor?

¡Pues no te voy a contar nada! Ja, ja, ja… ¡Nada, porque tú…!

Porque yo…

¡Porque luego lo cuentas todo! ¡No te voy a contar nada! ¡Ahora mismo acaba de tener un lapsus mi memoria…! Ja, ja, ja… ¡Que se me ha olvidado!

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