Tiene 24 años, es el portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, la primera vez que se puso en su condición de tal ante los periodistas estaba poco menos que acojonado y se llama Nacho Hernando. Es de Albacete, ha estudiado en Francia e Inglaterra y hace apenas unos meses no podía desplazarse hasta Toledo para asistir a un desayuno informativo con su presidente, Emiliano García-Page, porque no tenía ni 50 euros para echar gasolina al coche de su madre y desplazarse hasta la capital regional.
Ahhhhhh… Están leyendo el adelanto de la Entrevista Irreverente que le hemos hecho en encastillalamancha.es y que completa publicaremos mañana viernes.
Lean…
Es político, pero le encantaría haber sido periodista. Pero jamás intentaría manipular a uno porque, afirma, «sería una estupidez por mi parte»; lee todo lo que puede, sobre todo la prensa escrita y los periódicos digitales mientras reconoce que es «un enfermo de los comentarios» a las noticias de los medios de comunicación en internet; dice que un buen periodista es aquel «que te pone contra las cuerdas», y el malo es «aquel que no pone la verdad en la información como prioridad y sí la agenda para manipular o tergiversar lo que realmente ha dicho una persona».
Ahí donde le ven, con apenas 24 añitos, es el portavoz del Gobierno de Emiliano García-Page, además de director general de Comunicación. Y lo que leen, el adelanto de la Entrevista Irreverente que le hemos hecho en encastillalamancha.es y que, completa, publicaremos mañana viernes.
A Nacho Hernando no se le olvida la madrugada que viajaba en su coche desde Quintanar de la Orden a Toledo, el verano pasado, y se quedó dormido al volante… ¡Ufffff…! Gracias a que despertó en unas décimas de segundo, «cuando sonaron las bandas, el brrrrrrrrr… brrrrrrrrrr… (las líneas laterales de la carretera)». Se había puesto «cabezón», como él mismo recalca, y se empeñó en regresar a la capital regional. Puede contarlo. Horas antes, en la procesión a la que había sido invitado se le puso la cara completamente roja de la vergüenza que pasó cuando un grupo de mujeres, «cincuentonas y sesentonas y a las que yo cariñosamente llamo mis chicas», me dijeron…
¿Qué le dijeron? Ja, ja, ja… Mañana lo sabrán. «¡Me puse rojo perdido! Ya soy rojo de corazón, imagínate también en la cara. Les di dos besos y me hice una fotos con ellas».
Hernando, también secretario general de Juventudes Socialistas de Castilla-La Mancha, cuando aún no formaba parte del Gobierno regional y Page ni siquiera era presidente de la región, no pudo venir desde Albacete, donde vivía entonces, a Toledo a un desayuno informativo Espacio Reservado que organizó encastillalamancha.es con el entonces candidato del PSOE a la Junta «porque no tenía ni para pagarme la gasolina del coche de mi madre. Porque Albacete-Toledo cuesta 50 euros ida y vuelta».
Page no le ha echado, todavía, ninguna bronca, «algún pescozón que otro sí»; pero él a Page… Esperen y verán.
Su primer beso a una mujer fue en un avión; le sucede una cosa muy curiosa con sus orejas, porque la izquierda es flexible y la derecha está muy rígida (joder, como que me invitó a tocárselas, las orejas, digo, y lo pude comprobar), ja, ja, ja…, y del Gobierno de Castilla-La Mancha se echaría un bailecito con qué consejera…
¿Saben con quién? Pues da nombre y apellido. Como el de la famosa que más le atrae físicamente. Que es una Reina, por cierto, pero pongan a funcionar sus neuronas y piensen, piensen…
Por cierto, que de la primera vez que hizo el amor recuerda que… ¡¡¡Que fue menos incómodo que lo que le hizo un día un conocido político del PP!!!
Mañana sabrán por qué…