Ha sido camarero, «y así consta en mi hoja de vida laboral», dando extras en bodas, bautizos… bandeja en mano; becario del Registro Mercantil de Toledo y ha trabajado en una entidad financiera desde 2003. Nació en Toledo hace 42 años, es licenciado en Derecho por la Universidad de Castilla-La Mancha y se enamoró de su esposa, italiana, en un crucero por el Caribe, lo que le llevó a viajar en varias ocasiones al país transalpino «gracias a que Ryanair facilitó mucho las cosas por aquello del low cost».
Y es que entre sus aficiones está viajar, «antes de entrar en política lo hacía mucho». Es Carlos Velázquez, candidato del PP a la Alcaldía de Toledo, quien nos recuerda que para conseguir el amor de Ilaria tuvo que echar «pico y pala. Una historia muy bonita, pero no un amor a primera vista. Una locura por amor que terminó con una hija, Sofía».
Este contenido forma parte del Especial Elecciones ENCLM, donde intentamos conocer en profundidad a los candidatos a las elecciones municipales y autonómicas en Castilla-La Mancha del 28M, en este caso de Toledo.
El día que se estampó contra la pared «haciendo el cabra»
Enamorado del deporte, «aunque ahora con la política… Salía por las noches a correr dos días a la semana y era un habitual de las carreras populares de Toledo y la provincia. Estoy intentando retomar algún partido de fútbol con los amigos, jugaba de extremo derecho, y nadaba. La bici me gusta mucho, pero me rompí la clavícula bajando por la Bastida».
No fue el único percance, porque con 16 años, haciendo poco menos que el cabra… «Un día de ese verano estaba con un amigo, bastante conocido en el mundo de la hostelería de Toledo, en la Escuela de Gimnasia jugando al tenis. Las bolas las teníamos en un carrito de la compra y se me ocurrió subirme al carro y mi amigo me dio un paseo por la pista de tenis… y me estampé contra la pared. Me di un golpe bastante fuerte en la cabeza, cai inconsciente y para el hospital. Allí se dieron cuenta de que me había fracturado una rótula y ese verano…».
Desde luego, maravilloso no fue. «Sí, fue un juego de chavales, pero ni pude ir a la playa con mis padres ni a un campamento de inglés que organizaba la Junta».
«¡Cantaba muy mal!, pero me decían que me parecía a Serrat»
También recuerda el día que un amigo estrenó coche, «estábamos emocionados y nos fuimos a Valencia, nos dimos un baño en el mar y regresamos. Dudamos entre ir a Portugal o al mar… Éramos Ismael, Rafa, Dani, David y yo».
La música es una de sus grandes aficiones, «con 9 años empecé a tocar el clarinete y recuerdo que con la Banda Juvenil de Toledo, yo era un crío, fuimos a tocar en la Semana Santa de Cuenca, cuyas procesiones eran muy largas, de siete u ocho horas. Pasé muchísimo frío y me dormía mientras iba tocando, veía en sueños las camas del albergue donde dormíamos, ya que estaba deseando volver lo antes posible».
Un poco más crecidito montó, con unos amigos, un grupo, «la Popular Band», «y tuvimos un verano repleto de éxitos, ja, ja, ja… Estaba Joaquín Romera al teclado; Nacho Ruiz (actual candidato en la lista del PP por la provincia de Toledo a las Cortes regionales) al bajo; Pedro Pantoja (exalcalde de Villamiel), José Ángel Pérez Gómez, quien sacó un disco; Clara; Fernando (presidente de la Federación de Tiro con Arco de CLM) a la batería… Y yo, que tocaba la guitarra y cantaba cuando faltaba el cantante principal, que era José Ángel. Yo cantaba alguna de El Canto del Loco o de Loquillo y ¡cantaba muy mal!, pero me decían que cantaba como Serrat… Ja, ja, ja…».
Afirma que le gusta «toda la música. Cuando en casa friego o limpio los baños siempre escucho música, desde clásica hasta pop rock de los años 80, música electrónica… Pero el reguetón no me gusta, aunque a fuerza de escucharlo puedo cantar y me lo pasé muy bien el último verano con la canción de quédate, que la noche sin ti duele…».
Una huelga le cabreó tanto que… acabó entrando en política
Entró en política «a través de las asociaciones de estudiantes universitarios, en 1999, y llegué a ser presidente de la asociación popular de estudiantes universitarios». Todo comenzó cuando… «Hubo una huelga que era, desde mi punto de vista, de carácter político, gobernaba Aznar en aquel momento, y me aplazaron un examen que yo había decidido hacer ¡un año antes!. No me gustó porque era injusto. Que hagan huelga, pero que garanticen el derecho de quienes no queríamos hacerla. Hicimos una movilización importante, no conseguimos hacer el examen, pero me metió el gusanillo de la política por el tema de las injusticias».
A partir de ahí… Miembro del Comité Ejecutivo nacional de Nuevas Generaciones, diputado provincial y… mientras trabajaba en una entidad financiera en Seseña (Toledo). «Seis meses antes, la localidad había saltado a los medios de comunicación nacionales por el tema de las viviendas del Pocero, el PP decidió cambiar el candidato y Cospedal me pidió que diera un paso, por lo que me presenté a la Alcaldía».
Años después, opta a ser alcalde de Toledo, «ser alcalde es lo que siempre he percibido como la mayor aspiración en política, lo más duro y exigente, pero a la vez lo más satisfactorio».