Paco Núñez (Almansa, 1982) es el candidato del PP a las elecciones autonómicas de Castilla-La Mancha del próximo 28 de mayo. Repite como cabeza de lista en una cita electoral en la que quiere que sea el comienzo de un «cambio de ciclo» que también lleve a Feijóo a ser presidente. El libro que más le ha marcado es «Los reglones torcidos de Dios», es poco mañoso para las artes plásticas y se define como una persona «dialogante» que quiere gobernar Castilla-La Mancha «desde la moderación y el centrismo«.
Este contenido forma parte del Especial Elecciones ENCLM, donde intentamos conocer en profundidad a los candidatos a las elecciones autonómicas en Castilla-La Mancha del 28M.
¿Cuál es la primera decisión que tomarías?
Devolver al bolsillo de los castellanomanchegos una parte muy importante de lo que se les ha cobrado en impuestos, somos la tercera región con mayor esfuerzo fiscal y donde el exceso de recaudación como consecuencia de la inflación, siendo la región más inflacionista, ha sido mayor.
¿Por qué hay que votarte?
Ha llegado el momento del cambio de ciclo. La vida, como la política, tiene rachas, y el partido socialista gobernó Castilla-La Mancha con sus errores y sus aciertos, pero ahora ha llegado un cambio de ciclo en nuestro país, Alberto Núñez Feijóo va a gobernar en España y el PSOE ha demostrado que ya es inútil para la región, no tiene nada que aportar para que la región pueda crecer y liderar el ránking de las comunidades autónomas de España. Vemos como otras comunidades autónomas con otras políticas, como Madrid y Andalucía, están prosperando y avanzando. Andalucía es un ejemplo paradigmático de cómo en cuatro años de política del PP se le ha dado la vuelta como un calcetín. Castilla-La Mancha no puede quedar estancada con políticas socialistas del dinamismo y la fuerza que va a llegar a España con el Partido Popular.
¿La medida más importante que llevas en el programa electoral?
Hay medidas fundamentales para devolver la autoestima a los castellanomanchegos. La primera, la derogación de la ley de expropiaciones, es fundamental. No se puede tener en el siglo XXI una ley aprobada en el Parlamento que en lo que se ponga en duda que se pueda explotar una tierra, hay que derogarla, porque hay que dar confianza.
También hay que tener una ley contra la okupación, porque hay que dar a los ciudadanos seguridad, tranquilidad, confianza. Es clave. En materia sanitaria, los ciudadanos no pueden tener la incertidumbre de cuándo les van a operar o cuándo le van a realizar una prueba diagnóstica, eso tiene que acabar. También hay que recuperar la carrera profesional sanitaria, un plan de choque contra las listas de espera y modernizar la primaria. Necesitamos devolver la confianza a los castellanomanchegos, no sentirnos menos que nadie.
¿Cuáles son tus principios irrenunciables?
Soy una persona dialogante, que cree que hay que escuchar a los demás, y lo hago desde una moderación y un centrismo que es básico para poder gobernar en Castilla-La Mancha. No creo en el revanchismo ni en las venganzas, creo que entre todos, de manera unida, es como se avanza, por eso creo que hay que hacerlo desde el centro, desde el diálogo, el entendimiento y buscando el progreso, para que aquello que funciona pueda mantener y lo que esté mal, cambiar para que esté bien y no se pierda una sola oportunidad.
¿Cuál es tu grado de compromiso con el cambio climático?
Hay que hacerlo desde la perspectiva del realismo, desde el análisis concienzudo de los expertos que nos están diciendo cómo está evolucionando el medio ambiente, desde el respeto al medio ambiente y desde la adaptación de las políticas a generar entornos sostenibles. La sostenibilidad tiene que formar parte de nuestra agenda política, y tiene que estar basada en estudios y criterios de profesionales.
¿Un referente?
Adolfo Suárez. Fue el paradigma de la concordia, el entendimiento, el diálogo y de la capacidad de creer en España por encima de todo.
¿Una canción, libro o película que haya marcado tu vida?
He leído tres veces «Los renglones torcidos de Dios» (Torcuato Luca de Tena, 1979), pero reconozco que todavía no he ido al cine a ver la película y quiero ir a verla, porque después de haber leído tres veces el libro me parece que tengo opinar sobre la relación de cómo han sido trasladadas las páginas a la pantalla.
¿Alguna recomendación de serie?
No veo mucho la televisión porque no tengo mucho tiempo entre precampaña y campaña, pero soy muy de series españolas. Soy de poner la televisión y buscar la que haya, nunca he sido un fanático de continuar las serie y ver capítulos y capítulos, siempre las he utilizado como un medio de entretenimiento y diversión.
¿Qué es lo más loco que has hecho?
No soy muy de aventuras. Soy bastante predecible y de tenerlo todo bajo control. Meditar lo que voy a hacer, me gusta saber lo que va a pasar y saber que con lo que haces no dañas a nadie y echar una mano. Ni siquiera en la época de juventud era de grandes locuras.
¿En qué eres brillante y en qué patoso?
No soy brillante en artes plásticas. No soy capaz de pintar, de dibujar con éxito, ni de hacer papiroflexia. Cualquier cosa que tenga que ver con utilizar las manos con soltura se me da muy mal. Las bondades creo que las tienen que decir otros. Lo que yo he hecho toda mi vida es trabajar, hacerlo con humildad, sentido común, cercanía y escucha activa a los demás, pero las bondades tienen que ser otros las que las digan.