Una forma de adentrarse en la riqueza arquitectónica y natural de la provincia de Guadalajara y conocer sus gentes es a través de las diversas rutas de senderismo. Cada rincón de Guadalajara ofrecen experiencias únicas para todos los niveles. Desde la PR-GU 08 en Mandayona hasta el pintoresco recorrido por Palazuelos y Carabias (Sigüenza), u opciones más refrescantes como la de las Pozas del Aljibe, en Roblelacasa.
A continuación te damos los detalles de cada una de ellas para que puedas visitar los puntos más emblemáticos y desconocidos de Guadalajara a través de rutas senderistas.
El Barranco del Río Dulce desde la Hoz Pelegrina
En Guadalajara una de las rutas senderistas más reconocidas es la del Parque Natural del Barranco del Río Dulce desde la Hoz de Pelegrina, sin embargo, ha otro sendero que promete bonitas vistas de los valles de Guadalajara.
Así es la ruta PR-GU 08: Mandayona, Mirabueno y Aragosa que nos recomienda Víctor Pascual, de Senderismo Guadalajara.
Una ruta «muy asequible para la mayoría de público» nos cuenta Víctor, «sin apenas desnivel y apta para personas que anden habitualmente». Además, la recomendación para no perdernos nada «hacer la ruta en orden para tener unas vistas espectaculares del Barranco del Río Dulce».
Cómo llegar a la PR-GU08
Desde Guadalajara, se toma la Autovía A-2, se continúa por la carretera CM-1101 hacia Sigüenza, y se sigue la señalización hasta llegar a Mandayona. El sendero, de 10,88 km y una duración estimada entre 3 y 4 horas, es accesible durante todo el año gracias a su baja dificultad.
La aventura comienza en el Centro de Interpretación del Barranco del Río Dulce, donde podrás familiarizarte con el trayecto gracias a los paneles informativos dispuestos en el inicio de la ruta. A lo largo del camino, se cruzará un túnel bajo la carretera nacional y se seguirán postes señalizados con marcas blancas y amarillas, típicas de los senderos de pequeño recorrido.
Entre los atractivos principales se cuentan los impresionantes miradores naturales, como el Mirador del Pico, y las vistas hacia el Pico Ocejón y la Sierra del Alto Rey. También se encuentran puntos de descanso y refresco como la Fuente de los Pajarillos, ideal para reponer energías durante el trayecto.
Ruta senderista por los altos del Valle Salado
En Palazuelos (Sigüenza) encontramos una ruta circular que une este municipio con el de Carabias. Una ruta sencilla en dos de los pueblos con más patrimonio histórico de la comarca que nos introducen en el románico más auténtico y nos permiten disfrutar de las rutas de los Saladares del río Salado desde los altos de la Sierra Ministra.
Esta ruta tiene una distancia de unos 10 kilómetros (ida y vuelta) y una duración de tres horas. Además, es de una dificultad baja, lo que le hace ideal para todos los niveles.
Las épocas ideales para adentrarte en esta ruta son la temporada de primavera y de otoño. Esta ruta también es apta para MTB y BTT.
Durante la ruta podrás ver:
La Villa amurallada de Palazuelos, declarada Conjunto Histórico-Artístico.
El pueblo de Carabias donde no te puedes perder su iglesia parroquial, todo un ejemplo del arte románico rural, con unas características muy peculiares de la zona seguntina. Perfectamente restaurada.
Valle y salinas del Salado. Su gran diversidad litológica y geomorfológica por ubicarse en la confluencia entre el Sistema Central (pizarras y cuarcitas) y las parameras del Sistema Ibérico (areniscas, calizas, dolomías, margas y arenas albenses), da lugar a este espacio natural que alberga un conjunto de hábitat de alto interés
Las Pozas del Aljibe
Otras de las rutas de senderismo en Guadalajara es la que va de Roblelacasa a las Pozas del Aljibe.
Aquí encontramos dos opciones: un recorrido lineal y otro circular. Ambos recorridos con una duración aproximada de tres horas.
En el caso de la ruta lineal podrás iniciar el recorrido desde Roblelacasa. La distancia de unos 6 kilómetros discurre por caminos y sendas en buen estado. El tiempo estimado para la ruta es de 3 horas y se puede realizar durante todo el año, aunque es recomendable en el deshielo y época de lluvias, ya que es cuando las pozas se encuentran en su mejor momento.
A lo largo del recorrido podrás adentrarte en el paisaje típico de la Sierra Norte con la Arquitectura Negra de las localidades de Roblelacasa y los alrededores como telón de fondo.
Si vas a hacer esta ruta es importante extremar la precaución, ya que en el entorno de los Pozos del Aljibe la ruta discurre por zonas de roca resbaladiza con riesgo de caída.
El Castillo de Alpetea
En el Alto Tajo encontramos otra ruta apta para hacer en familia con dificultad baja y de duración estimada de dos horas y media. Se trata de una senda desde Villar de Cobeta hasta el Castillo de Alpetea.
Esta ruta con una distancia aproximada de 9 kilómetros es especialmente recomendable para los meses de primavera, verano y otoño, ya que es una zona alta y fría, sobre todo en invierno.
Durante el recorrido nos encontraremos con el Monasterio de Buenafuente del Sistal del siglo XII y de donde mana agua desde hace siglos así como de paisajes de sabinas hasta llegar al final: un espectacular y poco conocido mirador.
A 1.269 metros de altitud podremos contemplar los valles del Gallo y del Tajo; y si tenemos suerte, aves que sobrevuelan la zona.
Completa tu visita en Guadalajara
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