El mundo entero lloró en abril la tragedia de Notre Dame. La catedral, todo un emblema de París, Francia y Europa, fue pasto de un incendio que devoró buena parte de la cubierta, aunque por fortuna la estructura resistió.
«La gente ha salido rápidamente, pero muy tranquila»
Testigo de primera mano fue una familia toledana que estaba en el templo cuando se inició el brutal incendio. Según publicó el diario La Vanguardia, David, Silvia y Mónica, tres de los miembros de la familia, vivieron in situ este trágico fuego.
«Era el momento de la comunión, de repente ha sonado una alarma y una voz por megafonía nos ha conminado a salir del templo. La gente ha salido rápido pero muy tranquila porque no veíamos ni humo ni fuego en ese primer momento, hasta el punto de que el cura se ha resistido a interrumpir el oficio, ha seguido como si nada mientras la gente se iba yendo. Al final ha entrado en razón», relató Silvia.
Jóvenes de Cifuentes de vacaciones en Sri Lanka, testigos de los atentados
También en abril conocimos que un grupo de jóvenes de Cifuentes (Guadalajara) que se encontraban en Sri Lanka de vacaciones se toparon de lleno con la cadena de ataques perpetrados en esas fechas contra hoteles e iglesias en este país. Tuvieron que quedarse recluidas en su hotel por el toque de queda impuesto y dijeron encontrarse «tranquilas y bien».
Verónica, una de ellas, detalló días después a Europa Press que el grupo ya se encontraba en el aeropuerto esperando regresar a España. Por su parte, Pilar, tía de esta joven, confirmó que las chicas se habían puesto en contacto con la familia, detallando que estaban en «un pueblo cercano» al lugar donde se produjeron los atentados en el momento en el que estos tuvieron lugar.
«Han enviado un WhatsApp y dicen que están bien, creo que hoy mismo regresan a España», recalcó Pilar. «Estaban en un pueblo cercano, pero han dicho que estaban perfectamente en el hotel porque había toque de queda», ha subrayado.
Historias de miedo con finales felices.