El justicia no ve delito en lo ocurrido en la residencia de Tomelloso (Ciudad Real) donde se desató uno de los primeros brotes de Covid-19 y que más titulares acaparó al inicio de la pandemia, donde murieron 76 usuarios en los primeros meses de la llegada del coronavirus SARS-CoV-2.
Investigación a raíz de la denuncia de familiares
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Tomelloso ha archivado la causa abierta contra el director y la propia residencia Elder de Tomelloso, a raíz de una denuncia presentada por algunos familiares de residentes que murieron a consecuencia de la covid-19 al inicio de la pandemia.
El auto, al que ha tenido acceso Efe, decreta el sobreseimiento provisional y archivo de las actuaciones frente al director de la residencia, J.M.S.L., en calidad de investigado y frente a la Fundación Elder en la calidad de responsable civil.
Tras las diligencias dictadas para aclarar lo sucedido, el juez ha estimado que procede decretar el sobreseimiento provisional de la causa, ya que «no resulta debidamente justificada la perpetración del delito, en el que estaría involucrado el investigado».
Denuncia por homicidio imprudente y omisión del deber de socorro
Todo ello, después de que el juzgado tomara la decisión de investigar los hechos denunciados por algunos de los familiares de la residencia que, en su denuncia, atribuían un presunto delito de homicidio imprudente y omisión del deber de socorro al director de ésta.
Los familiares mantenían en su denuncia que en la dirección del centro no existía ni el más mínimo interés en actuar ante el avance de la pandemia y que, además, faltaban equipos de protección individual para los trabajadores que les permitieran a éstos atender a los ancianos, sin poner en peligro la salubridad de ambas partes.
Aseguraban que mostró un «absoluto desinterés»
Además, los familiares acusaban al director de la residencia de mostrar un «absoluto desinterés» y de haber abandonado la residencia, tras tener conocimiento del primer caso confirmado de infección por coronavirus en un usuario del centro.
En junio ya habían fallecido 76 usuarios
Todo ello, según los familiares, motivó que el Servicio Regional de Salud (Sescam) interviniera la gestión de la residencia cuando ya habían fallecido unas 15 personas en seis días y hasta finales del mes de junio de 2020 habían fallecido un total de 76 usuarios.
Para archivar la causa, el juzgado ha mantenido que no sólo resultaba imprevisible a primeros de marzo la evolución de los contagios por la pandemia y sus letales resultados, sino que las actuaciones que se llevaron a cabo en la residencia «completaban una actuación cuidadosa con la normativa que se iba proporcionando por parte de las autoridades, excluyendo cualquier tipo de infracción del deber de cuidado».
Además, ha advertido de que «la producción de un resultado lesivo» no convierte automáticamente en penalmente típica la conducta del cuidador o en este caso director de la residencia pues, en todo caso, «para que esto ocurra debería haberse acreditado una actuación peligrosa y descuidada del mismo».
Actuó «en línea con la percepción general de la población»
Así, el juez mantiene que la actuación del director de la residencia discurrió «en línea con el sentir o la percepción general de la población y de las propias autoridades sanitarias, que infravaloraron la capacidad destructiva del nuevo virus, según se advirtió a posteriori».
Y mantiene que no podía existir un nivel de previsión o una diligencia mayor que la que a fecha de febrero o principios de marzo podría exigirse a las autoridades sanitarias, ni la anticipación de medidas restrictivas o de contención que ni siquiera estaban previstas legalmente.
Por todos estos motivos, concluye que la situación de la crisis sanitaria ocasionada por la covid-19 conllevó a que los centros sanitarios o residenciales y su personal difícilmente se encontraran posibilitados de prestar asistencia sanitaria, escaseando además material sanitario que tenía por objeto evitar el contagio de la infección ya antes de la explosión de la pandemia en España.