La Audiencia Provincial de Guadalajara ha condenado a J.A.M.G, el vecino de Azuqueca de Henares acusado de degollar a su mujer el 28 de diciembre de 2017 tras una discusión, a 26 años y medio de cárcel por un delito de asesinato con alevosía con el agravante de parentesco y por las lesiones psíquicas ocasionadas a los dos hijos de ella, ya que al que tenían en común no considera probado que así fuera.
Conforme al veredicto de culpabilidad expresado ya el pasado mes de marzo por el jurado, ahora la Audiencia de Guadalajara ha condenado a J.A.M.G a la pena de 21 años de cárcel por un delito de asesinato con alevosía con la concurrencia agravante de parentesco y «actuar por ‘razones de género», teniendo también en cuenta el atenuante de arrebato, tal y como figura en la sentencia remitida por el Tribunal Superior de Castilla-La Mancha.
Y por daños psíquicos ocasionados a los hijos de la víctima
Asimismo, dicha sentencia contempla para el condenado la privación de la patria potestad de su hijo y le queda prohibido aproximarse a menos de 500 metros y comunicarse tanto con él como con los otros dos hijos de la víctima durante el tiempo que dure la condena.
También le impone la medida de libertad vigilada por tiempo de siete años y seis meses para su cumplimiento posterior a la pena privativa de libertad.
Dicha sentencia también recoge cinco años y seis meses de cárcel por los daños psíquicos ocasionados a los hijos de la víctima ya que presenciaron los hechos. Sin embargo, no considera acreditado que existiera menoscabo psíquico en el hijo de 16 meses que tenían en común al entender que el menor era «incapaz» de comprender los actos aun habiéndolos presenciado, aunque entiende que la separación de los cuidadores primarios podría tener consecuencias emocionales en un futuro.
En cuanto a la responsabilidad civil, según recoge la sentencia, el condenado tendrá que indemnizar a cada uno de los tres menores con 150.000 euros y con 45.000 euros a los progenitores de la víctima.
El condenado fue juzgado el pasado mes de marzo por degollar a su mujer, de 37 años, el 28 de diciembre de 2017 en el baño de la vivienda familiar causándole en el cuello varias heridas y con la presencia a varios metros, en otras habitaciones, de los tres hijos, uno de ellos del matrimonio.