El juzgado de lo Penal número 3 de Ciudad Real ha condenado a J.N.C., guarda de la finca La Caminera, a una pena de 21 meses de multa, a razón de 8 euros diarios, y al pago de una indemnización de 90.000 euros, por la muerte del lince Kairós, encontrado muerto en un lazo sin freno en Ciudad Real.

El acusado, que ha reconocido los hechos, ha aceptado de conformidad la pena que le ha sido impuesta por un delito contra la fauna recogidos en los artículos 334 y 336 de Código Penal, después de que el Ministerio Fiscal y las partes hayan llegado a un acuerdo antes de la celebración de la vista oral.

El Ministerio Fiscal ha rebajado finalmente su petición inicial de dos años y medio de cárcel que pedía para el acusado a una pena de multa y una indemnización a la que se une también la petición de inhabilitación para el ejercicio de la caza durante 3 años y medio, a la que se han adherido tanto la acusación popularn que ejercían Ecologistas en Acción y Aproca, y pedían 4 años de cárcel y 14 meses de prisión, en cada caso.

Por su parte, los abogados de la finca Promociones Sagemar y la aseguradora Mapfre también ha aceptado los términos de la sentencia.

El lince quedó atrapado en un lazo sin freno atado a un tronco

Los hechos tuvieron lugar en diciembre de 2014 cuando el guarda de la finca colocó un lazo sin freno atado a un tronco en el que quedó atrapado el lince Kairós que murió asfixiado debido al estrangulamiento.

El guarda, que al día siguiente comprobó el lazo, encontró el animal muerto en la finca La Caminera, localizada entre los términos municipales de Torrenueva y Torre de Juan Abad, y en vez de comunicar lo ocurrido decidió arrojar el cadáver al coto colindante, en el paraje Peruétano, donde fue localizado dos días después.

La abogada de Ecologistas en Acción, Carmen Daimiel, ha asegurado en declaraciones a los periodistas que al ejercer la acusación pública su organización ha optado por llegar a esta acuerdo ya que, en su caso, al actuar como acusación pública no podía exigir responsabilidad civil.

Además, ha añadido que lo importante de la sentencia radica en que el condenado lo ha sido en aplicación de los artículos 334 y 336 que reconoce que el uso de lazo ilegal es tan grave como el uso de veneno en el medio natural.

El abogado de Aproca, Santiago Ballesteros, ha opinado que se trata de una sentencia justa y Carmen Delgado, de los servicios jurídicos de la Junta, ha explicado que «en todo delito se debe hacer el ofrecimiento de acciones que la Ley prevé a las víctimas del delito», algo que no ha sucedido en este caso por lo que, al no haber tenido conocimiento del juicio, no han podido personarse.

En todo caso, de haber estado personada la Junta en la causa no se hubiera suscrito el acuerdo de conformidad alcanzado porque, ha esgrimido como principal motivo, hace un año un empresario propietario de una finca en Castellar de Santiago fue condenado a un año y medio de prisión por unos hechos similares.

En su opinión, la proporción de la pena de multa de este caso, con el del empresario, «es muy pequeña y hay un agravio total».

La condena por la muerte del lince Kairós es la segunda que se produce en la provincia de Ciudad Real después de que hace un año se ratificara la condena al empresario J.M. a año y medio de prisión, a tres de inhabilitación para la caza y a pagar 90.000 euros, en aquel caso por la muerte del lince de nombre ‘Grazalema’.