El vencimiento de la moratoria para construir o ampliar macrogranjas porcinas en Castilla-La Mancha puede hacer que el número de cerdos crezca un 19 % en la región, con un aumento de 362.863 animales, según cálculos de la plataforma Stop Ganadería Industrial.
En una nota de prensa, Stop Ganadería Industrial ha asegurado este martes que tras el fin de la moratoria el pasado 1 de enero, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha notificado que pueden reactivar la tramitación a 61 proyectos que quedaron en suspenso.
La moratoria podría paralizar 68 macrogranjas en CLM con una capacidad para más de 220.000 cerdos
Si se activaran estos proyectos, que afectan a 43 municipios de las cinco provincias de la región, habría 362.863 cerdos más en la región, que serían un 19 % más que el número de animales que hay en la actualidad, según el Registro Ganadero de enero 2025 del Ministerio de Agricultura), ha calculado la plataforma.
Asimismo, ha precisado que la información de los promotores (disponible en el buscador de expedientes de impacto ambiental de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha) las grandes empresas del sector cárnico (Cefusa-El Pozo, Incarlopsa, Tello y JISAP) representan casi la mitad de las cabezas de los proyectos pausados y que ahora podrían reactivarse (163.852 cerdos).
Mapa de las macrogranjas pausadas por la moratoria de las macrogranjas.
Preocupación en las plataformas vecinales
Stop Ganadería Industrial CLM, que fue creada en 2017, ha indicado que en los movimientos vecinales de las cinco provincias de la región que la integran hay preocupación por el riesgo de que estos proyectos de macrogranjas retomen su tramitación administrativa y finalmente se construyan.
Los movimientos vecinales consideran que «lejos de crear tejido económico en el territorio o fijar población los efectos de la producción industrial de carne amenaza la calidad de vida de los pueblos: malos olores, problemas de salud pública, contaminación de agua, suelos con excesos de nitratos».
La región con más zona vulnerable a nitratos
En este sentido, la plataforma ha destacado que Castilla-La Mancha ya es la región española con una mayor proporción de su suelo declarado como zona vulnerable a nitratos (47%) debido a las altas concentraciones de este componente en las aguas subterráneas,
Esta contaminación dejó en 2023 sin agua apta para el consumo a al menos 18.611 habitantes de 25 pueblos en la comunidad autónoma, según datos del SINAC-Ministerio de Sanidad.
Además, responsables de la Consejería de Desarrollo Sostenible mantuvieron el pasado mes de octubre, durante una reunión, que la ganadería industrial en Castilla-La Mancha tiene todavía mucho margen de crecimiento, y pusieron como ejemplo a Cataluña y a Aragón, las mayores comunidades por censo porcino.
Estos planteamientos han sido considerados por los colectivos vecinales integrados en Stop Ganadería Industrial CLM como «extremadamente preocupantes».
Les preocupa que la Consejería con las competencias medioambientales «defienda que Castilla-La Mancha aumente su censo porcino, y lo más grave es que tomen Cataluña como modelo a seguir, donde el 45 % de los municipios están declarados como vulnerables a la contaminación por nitratos de origen agrícola», ha advertido la plataforma.
En este contexto, Stop Ganadería Industrial C-LM ha aseverado: «La moratoria ha sido un espejismo que, en lugar de servir para frenar el crecimiento, va a conseguir acelerarlo con una tasa superior a los años previos a la moratoria», además de que critica que gran parte de los proyectos están promovidos directamente por las grandes empresas cárnicas, «que no tienen ningún tipo de arraigo en los pueblos en los que se instalan».
También han apuntado que la mayor parte de la carne se dedica a exportación al extranjero, por lo que no es para que se abastezca el mercado español, como muestra que en 2023 España exportó el 55,35 % de su producción de carne de cerdo, según datos del Ministerio de Agricultura.