La plataforma Mi Barrio sin Amianto denuncia que tres personas han fallecido en el Polígono de Toledo por mesotelioma, un cáncer del que es causante la exposición al amianto o asbesto, «en el 99 por 100 de los casos», según indican. Estos fallecimientos se habrían producido entre 1999 y 2015.
«Tienen un denominador en común que son personas que han fallecido por un cáncer que está vinculado en un 99 por 100 de los casos con la exposición al amianto y no han trabajado en la fábrica de Ibertubo», explica el portavoz de la plataforma, Rafael García.
Son lo que se denomina «enfermos ambientales», que contrajeron la enfermedad «por exposición ambiental», explica. Unos casos que, asegura, no han sido buscados desde la plataforma, sino que han acudido a ellos los propios familiares «ofendidos» porque el consejero de Sanidad, Jesús Fernandez Sanz, aseguró que en el Polígono de Toledo no se había producido ningún caso de mesotelioma.
«Las declaraciones llegaron a las personas del barrio que sí han padecido esta enfermedad y se dirigieron a nosotros, ofendidos, y con intención de hacerlo público», cuenta el portavoz de la plataforma.
Distinta percepción de la peligrosidad
A la plataforma le molesta que desde las administraciones no se tenga la misma percepción de la peligrosidad del vertido de «90.000 toneladas» de amianto que la que tienen los vecinos. «No tienen a sus hijos a 300 metros del vertido», expone.
Por ello, García rechaza el papel que entiende que han tomado las administraciones con el amianto del Polígono, puesto que cree que lo han hecho por una vía ordinaria y no como algo urgente, como un peligro para la salud.
«Se está tratando de manera ordinaria, como si fuesen escombros, y para nosotros es un problema de salud pública y con ello queremos evidenciar que hay vidas en juego, que hay que dar una solución inmediata como se hizo cerrando todas las fábricas de amianto que había en toda Europa y en prácticamente todo el mundo», subraya, añadiendo que «no se puede tener esa política con el amianto por un lado y por otro dejar un vertido con 90.000 toneladas al aire libre al lado de una población«.
«Es un problema que se había erradicado en toda Europa y aquí desmantelan la fábrica porque era peligroso y llevan con 5.000 camiones el vertido a un barrio residencial«, lamenta el portavoz de Mi Barrio sin amianto. «¿Por qué se permitió, por qué se deja 15 años ahí?», se pregunta.
Ahora, 15 años después, asegura García que desde las instituciones no se quiere «hacer un drama» porque se «evidenciaría que muchísimos políticos lo han hecho mal», cuestión por la que entiende que lo quieren hacer «de tapadillo, como si no hubiese pasado nada». Pero este «procedimiento ordinario» que explica que se está siguiendo «da la posibilidad a que los propietarios vaya a un juzgado«, como así ha pasado, y que de este modo el asunto se prolongue en el tiempo.
«Creemos que sí hay una intención en solucionar el problema, pero ellos (la Junta de CLM), en su afán por minimizar, abren la vía de que se pueda paralizar «, explica García.
Una lista electoral para reclamar una solución
La plataforma no descarta presentarse a la próxima cita electoral de mayo. Aunque rechaza valorar las posibles posibilidades que tendrían en las urnas, sí que están dispuestos a hacer «todo lo que esté en nuestra mano para mover las voluntades del status quo», dado que entiende que no valoran de igual manera el problema. «Ellos están muy tranquilos en sus casas. Son nuestros niños los que lo respiran«, incide.
«Sería una lista electoral con el objetivo de eliminar el amianto», asegura Rafael García, puesto que si «no hay nadie que sea capaz de representar a la ciudadanía en un problema que entendemos que es de salud pública, y no son capaces de solucionarlo, pues a lo mejor tiene que ser los propios vecinos, no sabemos si sería la solución, pero estamos desesperados ya«, lamenta el portavoz.