Entrepeñas y Buendía han perdido en los últimos siete días 1,17 hectómetros cúbicos. La reservas conjuntas de ambos embalses se quedan en los 455,76 hectómetros cúbicos, acercándose al umbral mínimo no trasvasable de los 400 hectómetros cúbicos.
La bajada de esta semana ha sido menos acusada que en semanas anteriores y según los datos de SAIH Tajo consultados por encastillalamancha.es el lunes 30 a primera hora de la mañana los embalses retienen 455,74 hectómetros, el 18,1 por 100 de la capacidad total conjunta de 2.518 hectómetros. Esa es la cantidad con la que cierran el año hidrológico, puesto que hoy es el último día.
Mucho tiene que ver el trasvase en que los pantanos de cabecera hayan mermado menos, puesto que esta semana, desde el miércoles 25 por la mañana, cesó el envío del agua al Levante a través del trasvase Tajo-Segura.
Pero aún así están siendo unos duros meses en la cabecera del Tajo. En los últimos cuatro han perdido la mitad del agua que ahora embalsan, más de 220 hectómetros cúbicos.
Baja Entrepeñas, sube Buendía
En la última semana el embalse de Entrepeñas ha bajado sus reservas hídricas en 1,51 hectómetros cúbicos. Así, el pantano con presa en Sacedón (Gudalajara) se queda en los 240,41 hectómetros, por debajo del 30 por 100.
Pero situación hay en Buendía a pesar de haber incrementado su volumen de embalse en 0,34 hectómetros cúbicos, pero sin embargo solo está al 12,61 por 100 de su capacidad con 215,33 hectómetros.
Por debajo de las existencias de 2018
El 2018-2019 no ha sido un año muy excelso en la cabecera del Tajo. Con trasvases aprobados cada mes, después de todo este curso hidrológico Entrepeñas y Buendía retienen 123,37 hectómetros menos que hace un año, cuando embalsaban 579,13 hectómetros cúbicos, el 23,43 por 100 de la capacidad total conjunta. El 1 de octubre de 2018, Buendía albergaba 274,75 hectómetros cúbicos por los 304,38 que había en Entrepeñas.
Entrepeñas y Buendía, en la UVI
Los municipios ribereños de la cabecera del Tajo han lamentado, que cerrado el actual año hidrológico, se haya concluido con los embalses de Entrepeñas y Buendía «en la UVI, en una situación crítica» al pasar del 24,2 por ciento por estas mismas fechas en 2018 al límite del 18 por ciento de la capacidad de estos pantanos.
Así lo ha denunciado en declaraciones a Europa Press el vicepresidente de los ribereños y presidente de la Mancomunidad de Aguas de Municipios Colindantes de los Embalses de Entrepeñas y Buendía, Borja Castro, coincidiendo con el cierre del año hidrológico este mismo lunes, 30 de septiembre, y con una situación de los pantanos por debajo del 19 por ciento de su capacidad.
El vicepresidente ha avanzado igualmente, la celebración, el próximo domingo, en Albacete, de una reunión de la Asociación con los Regantes de Murcia para hablar precisamente por el uso del agua del trasvase, aunque no ha querido avanzar más al respecto.
Para Castro, que es también alcalde del municipio ribereño de Alcocer, está claro que la situación meteorológica de este año cierra el año hidrológico con un 20 por ciento menos de precipitaciones en la cuenca del Tajo, pero también ha atribuido la criticidad que sufren que en este periodo se han trasvasado desde sus pantanos más de 300 hectómetros.
Castro ha aludido a la «paradoja» de que mientras en este año hidrológico ha descendido el nivel de agua de la cuenca del Tajo, en cambio, en la del Segura se ha registrado un aumentado las reservas de aproximadamente un 5 por ciento más de capacidad interanual con respecto al pasado año.
Por ello, ha pedido el cese «de inmediato» de un nuevo trasvase para el mes de octubre, algo que se contempla siempre y cuando Entrepeñas y Buendía se sitúe en los límites trasvasables ha matizado tras puntualizar que precisamente, en este momento los embalses se sitúan 60 hectómetros por encima del nivel 4, en el que de forma automática se puede aprobar cualquier trasvase, ha dicho.
Para Castro es evidente que en este momento «se está gestionando miseria» y ha recordado que todavía no se ha ejecutado el trasvase de septiembre, que además se aprobó cuando aún quedaban pendientes de trasvasar seis hectómetros.
Por ello, ha considerado que antes de seguir derivando agua de la cuenca del Tajo, se debe de tener también en cuenta la de la cuenca del Segura y «si presenta mejores números, es obvio que no se tiene que trasvasar».
En este sentido, ha hecho referencia a la situación de excepcionalidad que se ha dado recientemente en la cuenca del Segura tras la gota fría y aunque ha dejado muy claro: «no van a hacer acicate desde la asociación con la desgracia de una región», sí ha reconocido que es incuestionable que, «allí, en un tiempo récord, se recogió una precipitación mucho mayor a la reproducción de esas lluvias días después en la Alcarria Sur».
No ha dudado de que se trata de una «fotografía puntual» por una rotura del post-trasvase a la altura de esa región pero, en todo caso, desde la asociación espera que el líquido elemento no se esté desperdiciando y que se solucione pronto la misma.
«Iniciamos el nuevo curso hidrológico en una situación límite», ha incidido tras insistir en que la solución no pasa por «mirar al cielo, sino por revisar toda la política trasvasista».
En este sentido, cree que lo más conveniente es mirar hacia la constitución de una mesa de negociación regional del agua en la que estén implicados todos los actores, incluidas las administraciones, de la que considera que es incuestionable que salga un Pacto Regional del Agua.
Para Castro, «no es lógico que se trasvase de una región seca a otra seca», ha dicho tras insistir en que los ribereños «nunca» se opondrán a los trasvases para el consumo humano pero sí al «negocio ilegal» de regadíos del Levante con un agua que no sobra a la cuenca del Tajo.
Quieren tener voto en la Comisión del Trasvase
En cuanto a los compromisos establecidos con el Ministerio de Transición Ecológica, ha señalado que, aunque ahora están paralizados porque el Gobierno actual está en funciones, su deseo es que el nuevo que salga de las urnas se ponga en marcha «con urgencia».
A este nuevo Gobierno le piden desde la asociación que les incluya en la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura no como «invitados o meros notarios», sino «con voz y voto», ha dicho Castro.
En la comarca de Entrepeñas y Buendía el verano ha vuelto a ser diferente porque los Mares de Castilla ya no lo son tal, sino «riachuelos o arroyos» que se pueden cruzar de un lado a otro, y algunos agricultores están comenzado a poder reutilizar tierras que antes estaban cubiertas de agua.
Además, algunos municipios han tenido que ser abastecidos mediante cisternas, de ahí que sus pueblos consideren que es más necesario que nunca un consenso político en este asunto.
Posible contratación con las diputaciones para contratar técnicos
Por otra parte, Castro ha anunciado que ya hay un compromiso de las diputaciones de Cuenca y Guadalajara con la Asociación de Municipios Ribereños para la firma de futuros convenios en el año 2020 con el fin de que se puedan dotar de la posibilidad de contratar a técnicos que les asesoren para su intendencia y desarrollo.