La Guardia Civil ya ha dado con el presunto autor de la lince ibérico cazada ilegalmente en los Montes de Toledo. La muerte de Nenúfar posiblemente también desembocó en la muerte de sus cuatro cachorros, puesto que dada su corta edad se teme que no pudieron sobrevivir.
La lince murió por un disparo de escopeta «a bocajarro», según indicó Antonio Aranda, jefe del servicio de espacios naturales de la Consejería de Desarrollo Sostenible de CLM. Se produjo en Menasalbas (Toledo) y la Guardia Civil ahora investiga a este cazador por un presunto delito contra la flora y la fauna.
El 14 de junio un agente medioambiental de Castilla-La Mancha localizó el cadáver de la lince en un coto del término municipal de la localidad toledana.
Nenúfar es una lince liberada en 2017 en el marco del proyecto Life+Iberlince de recuperación de la especie cuando fue cazada estaba criando a sus cachorros de solo tres meses de edad. Uno de sus cachorros fue encontrado también sin vida y se cree que sus tres hermanos también corrieron la misma suerte.
Por parte del Agente Medioambiental de la zona se realizaron las primeras actuaciones, poniendo inmediatamente los hechos en conocimiento de la Unidad del Seprona de la Guardia Civil de Toledo, quien se hizo cargo de la investigación.
El cazador asegura que confundió a la lince con un zorro
Los agentes centraron la investigación en el entorno de las personas que cazaban en la zona de este coto donde apareció el cadáver de Nenúfar, llegando a identificar y localizar a la persona responsable de la muerte de este animal, según informa el cuerpo en una nota de prensa
El cazador aseguró que había disparado al animal confundiéndolo con un zorro, por lo que el Seprona le tomó manifestación como investigado no detenido por un delito relativo a la protección de la flora y fauna, haciendo entrega de las diligencias instruidas en uno de los Juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Toledo.
En esta investigación han participado junto con el Seprona de la Guardia Civil de Toledo, Técnicos de Medio Ambiente y Agentes Medioambientales, adscritos a la Dirección Provincial de Agricultura y Medio Ambiente.
Ecologistas en Acción denunció públicamente el caso
Esta primavera hubo una noticia que todos los amantes de los animales a buen seguro que disfrutaron. Era la información de que había nacido una camada de lince ibérico y de la que se tuvo constancia a través del entonces consejero de Medio Ambiente, Francisco Martínez Arroyo, en un vídeo grabado por los Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha:
Pero esa bonita noticia se ha tornado en trágica, puesto que Nenúfar, una lince nacida en 2016, fue víctima de la caza, tal y como denunció Ecologistas en Acción.
Los cuatro cachorros fueron alumbrados en el primer y último parto de Nenúfar. Nacieron en libertad después de que la madre se asentase en una zona de los Montes de Toledo donde se encontraba el macho Mazapán, un año mayor que Nenúfar, como indica su nombre que comienza por M, la que se asignó a todos los nombres de linces nacidos en 2015.