«Urge y mucho» aprobar las nuevas normas de explotación del trasvase ha afirmado Emiliano García-Page esta mañana durante su intervención en el acto de colocación de la primera piedra de la nueva Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) en Villanueva de la Torre (Guadalajara).
Tras recordar que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha salido victorioso de todas las sentencias del Tribunal Supremo interpuestas por la Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía y colectivos de regantes contra el nuevo plan de cuenca del Tajo o los caudales ecológicos, ha recordado al Ejecutivo español que es una obligación ineludible y una medida que no tiene que pasar por el Congreso y someterse al estrés de votaciones que se registra con cada iniciativa gubernamental.
«La voracidad por el agua en algunos sitios de España»
«Hemos ganado todos los pleitos y recursos por los caudales ecológicos, tanto nosotros como el Ministerio de Transición Ecológica y hemos corregido que el Tajo fuera el único río en Europa que no tuviera caudal ecológico; es increíble dónde puede llegar la voracidad por el agua en algunos sitios de España».
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«No puede haber 150.000 hectáreas de regadío ilegal»
«La realidad es que falta agua y no puede haber 150.000 hectáreas de regadío ilegal y aquí no tengamos agua para atender los regadíos instalados o que empresas no se instalen por falta de abastecimiento», ha continuado afirmando el presidente de la Junta, que también se ha referido a las zonas más afectadas por la sequía en la comunidad autónoma y para las que se están estudiando medidas.
Esta misma semana, la la portavoz del Ejecutivo castellanomanchego, Esther Padilla, aseguraba no entender que se incumplan los plazos de los propios decretos que aprueba el Gobierno central, y «más cuando las sentencias del Tribunal Supremo una y otra vez están avalando la necesidad de aprobar las nuevas reglas de explotación del trasvase y el establecimiento de los caudales ecológicos», ha argumentado.
En este sentido, Padilla recordó que se está a punto de cumplir dos años desde que se aprobó este Plan Hidrológico y que el Gobierno de España tenía en ese momento hasta julio del 2023 para aprobar las nuevas reglas de explotación y en febrero del 2024 deberían entrar ya en vigor estas medidas. Para Padilla, no existe «ninguna excusa» ni hay «ningún motivo» para seguir retrasando la aprobación de las nuevas reglas.
Advierten de que el retraso «tiene consecuencias»
La portavoz advirtió una vez más que el retraso de las nuevas reglas de explotación «no es inocuo» y tiene consecuencias como que en estos 12 meses de retraso se ha trasvasado un volumen de agua «que seguro que no hubiera sido posible con las nuevas reglas de explotación».