En una comparativa realizada por la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía se puede ver cómo la parte del embalse de Entrepeñas más cercana al pueblo de Sacedón está completamente seca. En una situación totalmente distinta a la de 2016, y eso que no era para tirar cohetes, este remanso, aunque ya no es remanso ni es nada, está totalmente vacío. Además, aquí es donde solían estar atracadas decenas de embarcaciones que, con el paso de los meses se han tenido que ir o bien del embalse o bien atracar en otro punto del pantano.
En el último recuento de las reservas de agua realizado ayer, los dos embalses más importantes de la cabecera del Tajo, Entrepeñas y Buendía, apenas llegan hasta el 10 por 100 de su capacidad con 248,38 hectómetros cúbicos, tras perder 3,2 en la última semana. Pero si solo contamos el de Entrepeñas, este se queda con solo 83,72 hectómetros, un 10,43 por 100 de su capacidad de 802 hectómetros. ¡Ah! Y todo esto sin contar con el cieno y el lodo que hay dentro de estas mediciones, porque eso también está contabilizado.
Entrepeñas con menos de la mitad de agua que en 2016
La situación en 2016 era un poco más liviana. En el conjunto de los dos embalses superaban los 444 hectómetros y solo el pantano con presa en Sacedón se iba hasta los 183,6 hectómetros, 100 más que en la actualidad. Esta cifra supone que en la actualidad hay menos de la mitad de agua embalsada.