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sábado, 4 de enero de 2025
Centro Cívico de Valparaíso (Toledo). Foto: Carlos Martín Fuertes
Centro Cívico de Valparaíso (Toledo). Foto: Carlos Martín Fuertes
Artículo de opinión - 02 enero 2025 - Toledo
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Saben ustedes que lo habitual es que, en los días previos a la festividad de los Reyes Magos, los pequeños escriban sus cartas pidiéndoles tal o cual cosa; los mayores y a través de los medios de comunicación también solemos solicitar nuestros deseos. Obviamente servidor no va a pedir juguetes, pero si solicitará algunas cosas o mejoras que contribuirían sin ninguna duda a mejorar la cacareada calidad de vida y el estado anímico de todas aquellas personas que disfrutan o no de tal servicio o instalación. Por ello, digiriéndome en general a la capital regional donde resido, solicito a los Magos esta pequeña lista. Unas mejoras dependen del Gobierno regional; otras del Ayuntamiento, otras del central y de la educación y buen gusto de los hombres y mujeres que poblamos la ciudad y su entorno.

Comienzo por la más veterana en el ranking, la que se pasan por el forro nuestros gobernantes desde hace más o menos ocho años despreciándolo de manera impune: las escaleras mecánicas de la estación de autobuses. Constituye una vergüenza nacional el que lleven tanto tiempo sin funcionar y que debería sonrojarles y figurar en el libro de los Guinness. Gobierno regional y Ayuntamiento están llamados a solucionar el problema, pues va camino de eternizarse. Lo peor, como el chiste del burro del tío Alegrías. Se acostumbró a no comer y se murió de hambre. Traduzcan la moraleja.


Sin salirnos de escaleras mecánicas vayámonos a las del Granadal, en las Covachuelas, donde miles de turistas y usuarios diarios en general se llevan una sorpresa con un tramo parado desde hace meses también. El mero ruido que muchas veces emiten las escaleras metros antes de llegar a la instalación hace que te mosquees razonablemente. Creo que es el Ayuntamiento quien debería solucionar la situación, aunque me soplan que en enero podría quedar solucionado el asunto.

Como vecino de Valparaíso que soy, después de llevar en el barrio casi 30 años y tener el honor de ser el segundo morador del mismo en llegar, reivindico y pido una oportunidad como el torero aquel, El Platanito al concejal de Movilidad para que los Reyes nos traigan el autobús los sábados por la tarde al menos, cada media hora. Pruébenlo y luego decidan a tenor del resultado. Dennos la oportunidad al menos y pongan en marcha el autobús a ver qué sucede. Qué ocurre con el que nos llevará al hospital del polígono. Y no olviden a los nuevos vecinos de La Legua para aumentar una parada más en el recorrido.

Y sin salirnos de mi barrio, aunque es válido el argumento para toda la ciudad, pongamos freno a la multitud de excrementos que campan por las aceras de ciertos barrios Y mano dura para los infractores que es la única varita mágica que surte algún efecto. Lo demás son pamplinas y cabreos estériles. Y podemos extenderlo a los alrededores de los contenedores de basura. Que no, que el Ayuntamiento lleva ejecutando adecuadamente la limpieza de estos lugares bastante tiempo Lo que sucede es que muchos desaprensivos se aprovechan de la oscuridad o soledad del lugar y dejan las bolsas fuera demostrando lo cerdos y vagos que son. Aquí falla la conciencia social.

Demasiados destrozos

Igual puedo decir de los bancos, papeleras o cristales de marquesinas del autobús rotas. Son nuestros hijos los cafres causantes de esos desmanes y nadie más. No podemos echar la culpa y el balón a los centros educativos. Estos son colaboradores de la tarea, pero si no hay materia prima, qué van a hacer los docentes. Pues eso, torear como pueden en una profesión tan digna. Sin la implicación de los padres es tontería seguir. Sobra blandenguería y falta rigor y autoridad. Si, escribo bien. La autoridad en el buen sentido de la palabra es necesaria en toda sociedad civilizada y que pretenda mejorar y aportar cosas buenas al mundo.

Otra cosa que pido a los Reyes es el cumplimiento del acuerdo por unanimidad de todos los grupos políticos del Ayuntamiento desde hace varios años y de anteriores corporaciones en dotar al centro cívico del barrio de un funcionario para realizar gestiones municipales y que el centro no dependa de la generosidad y benevolencia de la A.VV. “Río Chico”. Es el único que funciona así y constituye una de las joyas de la corona del barrio Que asuman su responsabilidad la Corporación. Un barrio con tanta población joven necesita, ente otras muchas cosas, un lugar para la lectura y cultura como es disponer de una biblioteca.

Sin olvidar dos palabras mágicas que son el amor y el respeto. Si todos lo pusiéramos en práctica el mundo iría mucho mejor. Y si reflexionamos sobre las palabras del Papa Francisco en la inauguración del Año Jubilar y de la Jornada Mundial por la Paz mejor. Viene a recordarnos Francisco, que los bienes y recursos no pertenecen a un grupo de privilegiados, sino a todos y que nos revelemos ante la injusticia social y la inadecuación de los salarios. Casi nada. Y recordar que el núcleo fundamental de la sociedad lo constituye la familia.

Y puestos a pedir, me apunto a que esa legión de desaprensivos que dejan las bolsas de basura fuera de los contenedores habiendo espacio hagan lo que deben; que los guarros que tiran botes de bebidas, bolsas de comida o golosinas y paquetes de tabaco en cualquier lado lo depositen en las papeleras. Aquí nos dan sopas con onda en muchos países y desde luego no somos los primeros. Sí lo somos en ser más incívicos y mal educados.

En fin, amigo lector, que los Reyes al menos nos traigan lo que ellos estimen que nos merecemos y necesitemos, sobre todo salud. Y también clarividencia para los responsables del trazado del AVE de Madrid -Lisboa a su paso por Toledo. ¡Feliz año nuevo!

«Y el pueblo, qué dice», por Carlos Martín-Fuertes

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