El diputado nacional del PP y exalcalde de Toledo Agustín Conde, ha rememorado hoy el «cerco de hambre y sed» al que dice que le sometió la Junta de Comunidades, del PSOE, cuando él estuvo al frente de la Alcaldía. A preguntas de los periodistas en una rueda de prensa, ha dicho que cuando ahora oye al alcalde socialista, Emiliano García-Page, lamentarse por no recibir apoyo de la Junta, lo que le recomienda es que «se ponga a trabajar» porque «con empeño, las cosas salen». Por otro lado, ha dicho que la declaración de la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, el 3 de octubre por el caso de los espías «es la tramitación normal de un procedimiento civil».
Agustín Conde ha señalado que él vivió una situación «parecida» a la de Page pero con unas condiciones muy distintas porque era una época de «vacas gordas» y la Junta «tenía dinero para dar y tomar».
Y no solo es que él pidiera y no le dieran «ni un duro, es que la Junta de Comunidades ni siquiera pagaba los impuestos de vehículos ni el IBI ni los convenios que firmaba, era el mayor deudor del Ayuntamiento», ha indicado.
Pero «como sabía que no podía contar con el Gobierno regional», dice que empezó a hacer las cosas por su cuenta, ha recordado el exalcalde, quien ha confesado que llegó a sentirse como «Alfonso VIII cuando llegaban los almorávides por los Montes de Toledo».
Fue gracias a Rodrigo Rato, cuando ha dicho: «Conseguimos escaparnos del cerco de hambre y sed al que nos sometieron con los 4.500 millones de pesetas del plan de renovación del centro histórico al que el Ayuntamiento debía aportar el 15 por 100 y, cuando pidió ayuda a la Junta, les dio cero».
«Entonces, el consejero de Obras Públicas era el actual alcalde de Toledo, Emiliano García-Page», ha dicho Conde.
Por otro lado, Conde ha respondido también sobre el juicio fijado para el 3 de octubre, cuando declararán María Dolores de Cospedal y otros dos cargos del PP en el juzgado tras la presentación de una demanda por parte de una agencia de detectives por afirmar supuestamente que el PSOE contrató a esta empresa para espiar al PP.
Así lo acordó el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de Coslada (Madrid), tras la vista previa al juicio en el que también están demandados la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero y el portavoz del PP en las Cortes regionales, Francisco Cañizares, quienes prestarán asimismo declaración.
Sobre ello, Agustín Conde ha explicado que se trata de una demanda civil, donde la parte demandante ha propuesto una prueba que consiste en una declaración, «en sede civil», ha insistido, de tres personas.
Cada vez que una parte propone una prueba, habitualmente el juez la admite si la considera proporcionada y razonable, ha señalado.
Agustín Conde ha dicho que esto está «muy hilado» con lo que sucedió ayer en Ciudad Real, que fue el archivo «en sede penal» de una denuncia interpuesta por quien «apunta ser un caradura de proporciones siderales con el gran apoyo del PSOE, que difamó injustamente a la alcaldesa de Ciudad Real», ha dicho.
«Todos recordamos aquella polémica en que llegó un individuo que, como quería cobrar unas facturas que no se le debían, pues se dedicó a difamar a la alcaldesa, y el juzgado de lo penal ha decidido archivar esa causa en un auto tremendamente duro contra el denunciante», ha explicado Conde.
El diputado popular ha señalado que «al PSOE se le debería caer la cara de vergüenza después de eso».