El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha asegurado hoy que «hoy es un día feliz» por la aprobación en las Cortes de la ley «antifracking», que ha destacado que cumple un compromiso adoptado por el presidente regional, Emiliano García-Page, en el año 2013.
«Hemos hecho lo que teníamos que hacer escuchando al pueblo de Castilla-La Mancha», ha aseverado Martínez Arroyo durante su intervención en el Pleno del Parlamento autonómico, donde ha asegurado que la ley cumple con las garantías jurídicas exigidas.
Se ha «conseguido que en Castilla-La Mancha haya una ley que impida la práctica de la fractura hidráulica (fracking)», ha resaltado el consejero.
Y ha recordado que García-Page se comprometió a impulsar esta normativa en El Bonillo (Albacete) en julio de 2013, cuando aseguró que incluiría en su programa electoral «el compromiso de El Bonillo, es decir, prohibir por ley la técnica de experimentación peligrosa no convencional con el gas».
Una vez en el Gobierno autonómico, ha recordado que el Consejo de Gobierno celebró en septiembre de 2015 una reunión dedicada al tema de la fractura hidráulica, en la que participaron miembros de las plataformas ciudadanas que rechazan el fracking.
Las plataformas «antifracking» de Campo de Montiel-La Mancha y de Guadalajara, cuyos representantes han acudido a la tribuna de invitados, les «han hecho recorrer el camino», con lo que han unido lo «intereses de la sociedad civil de Castilla-La Mancha y del Gobierno de Castilla-La Mancha que está y estará de parte y del lado de los ciudadanos de la región».
«Ese proceso de interlocución finaliza hoy después de muchas reuniones, de mucho trabajo conjunto, de mucha participación, de visitas a Campo de Montiel y a la provincia de Guadalajara», ha señalado el consejero.
Con ello, ha defendido que el Ejecutivo autonómico «ha antepuesto en esta cuestión y en todas la prudencia frente a la temeridad, al no haber seguridad suficiente de las consecuencias medioambientales» de esta práctica.
«Es una ley a favor del medio ambiente y de la protección de la salud pública de los ciudadanos de Castilla-La Mancha y es a favor del uso del agua para aquellos que están todos los días generando riqueza, los agricultores y ganaderos de la región», ha aseverado.
La ley, ha apuntado el consejero, establece que en un plazo de 18 meses se elaborará un plan estratégico de la utilización de la fractura hidráulica en Castilla-La Mancha que «va a establecer las exigencias para las empresas que quieran hacer fracking en Castilla-La Mancha».