El consejero de Hacienda, Arturo Romaní, ha destacado, al hacer balance de la legislatura, la reducción del déficit de Castilla-La Mancha en más de seis puntos, un logro «sin precedentes» que se ha compatibilizado con una «gestión eficiente», que ha permitido mantener los servicios públicos.
Romaní ha subrayado que, en los dos años transcurridos de legislatura, el Gobierno regional ha conseguido unas cuentas sostenibles y ha logrado «algo que no tiene precedentes y que consideramos que es histórico», que es reducir el déficit de la comunidad autónoma en más de seis puntos.
El desequilibrio entre los ingresos y los gastos, «que era completamente insostenible» ha pasado de un 7,87 por 100 a un 1,5 por 100, con lo que se ha acomodado el nivel de gasto a los ingresos y se ha llevado a un nivel sostenible «sin comprometer a generaciones futuras», ha valorado Romaní. Además se ha «cortado en seco el crecimiento de la deuda», lo que supuso un ahorro en un solo año de 1.945 millones de euros entre 2011 y 2012, ha recordado.
Según Romaní «se ha conseguido hacer compatible un ajuste muy importante en términos cuantitativos con una gestión eficiente, que ha permitido mantener y garantizar los servicios públicos y llevarlos a niveles sostenibles, que se puedan pagar»
También se han reducido mucho los costes de funcionamiento de la Administración y se han eliminado muchas duplicidades (suprimiendo, por ejemplo, el Defensor del Pueblo, el Consejo Económico y Social y la Comisión Regional de la Competencia).
«TODO GASTO ES REVISADO PARA VER SI ES PRESCINDIBLE»
Asimismo, Romaní ha señalado que se han introducido muchas novedades con objeto de que el gasto público sea controlado exhaustivamente, de forma que «todo gasto es revisado para ver si es prescindible, si se puede priorizar otro gasto o si se puede gestionar de una forma más eficiente».
Otra de las claves de la mitad de la legislatura ha sido la lucha contra la morosidad pública, en la que según Romaní, «se han dado avances enormes, atendidas las circunstancias de los mercados financieros y del volumen que había que financiar». En 2012 se hizo un «esfuerzo enorme», ya que se pagaron el 87 por 100 de las obligaciones del propio ejercicio y además se pagó el 86 por 100 de las obligaciones pendientes de años anteriores.
Este año se han pagado ya 336 millones de euros de obligaciones de años anteriores y, además, se lleva al día el presupuesto corriente al día, a 30 de junio el presupuesto ejecutado está pagado en un 90 por 100, ha subrayado el consejero.
Entre los «hitos» del proceso de recuperación de la confianza, que según Romaní se ha desarrollado en estos dos años, se ha referido a la obtención la autorización de endeudamiento para Castilla-la Mancha, que ha permitido al Gobierno regional suscribir operaciones financieras.
En este sentido, ha asegurado que todas las operaciones financieras que se han suscrito han tenido unas condiciones de financiación muy buenas, pese a las circunstancias desfavorables de los mercados financieros.
PRESUME DE UNA GESTIÓN «RIGUROSA, EFICAZ, EFICIENTE Y TRANSPARENTE»
Romaní ha resumido: «En estos dos años en la Consejería de Hacienda hemos llevado a cabo una gestión rigurosa, eficaz, eficiente y transparente de las finanzas públicas regionales y se ha priorizado el gasto en un entorno de recursos limitados, con el objeto de garantizar la sostenibilidad de los servicios públicos universales, gratuitos y de calidad».
Se ha incidido mucho en materia de control del gasto público, en la reducción de la morosidad en la Administración y se han dedicado «muchos esfuerzos y recursos para apoyar a las pymes a los autónomos y a los emprendedores en materia de financiación». «Todo esto lleva al objetivo final de conseguir la confianza en la región y a recuperar su credibilidad», ha añadido Romaní.
Según el titular de Hacienda, los resultados de todo este proceso de reformas se muestran de una forma gráfica en la transferencia de crédito de 18 millones de euros acordada recientemente de gastos financieros para un plan de listas de espera en sanidad y al ingreso mínimo de solidaridad para las personas que más lo necesitan.
Romaní ha expresado su satisfacción, porque la bajada de la prima de riesgo «ha supuesto disponer de estos 18 millones de euros que iban a ser gastados en intereses» y dedicarlos a estos fines. EFE